María Jesús Montero musita «cabrón» a un diputado del PP en el pleno del Congreso>
«¡Tú qué estás diciendo!» y «¡tranquilo, y tranquilo!» fueron algunas de las expresiones que la vicepresidenta ha formulado dirigiéndose a algún integrante del Grupo Popular mientras Pedro Sánchez respondía a las preguntas de la oposición en el Congreso de los Diputados.
Al terminar la intervención del presidente, Montero ha aplaudido de forma estentórea y ha gritado «¡Muy bien, presidente!» de forma tan alta que lo ha recogido perfectamente el micrófono de Pedro Sánchez.
Ésta no es la primera vez que la vicepresidenta adopta una actitud poco edificante en sede parlamentaria. El pasado mes de marzo ya provocó la indignación de los diputados del PP cuando se dirigió a ellos gritándoles «¡cuidado!» mientras los señalaba con el dedo índice cuando Sánchez reclamó la dimisión de Isabel Díaz Ayuso.
La vicepresidenta parece cómoda en el rol de la dirigente socialista que muestra su apoyo a Pedro Sánchez de forma más vehemente. Durante la concentración de militantes a las puertas de la sede del PSOE para pedir a Sánchez que no dimitiese, en los cinco días que el presidente se tomó para reflexionar tras salir a la luz los casos de presunta corrupción de su mujer, Montero sorprendió al expresar su apoyo con saltos y gritos enfáticos.
La política sevillana, que al comienzo de su carrera en Madrid llamó la atención por su estilo desenfadado -se hizo viral un vídeo en el que decía a una periodista 'chiqui, 1.200 millones no son nada' - y su marcado acento andaluz, ha dado una vuelta de tuerca a su personaje y ha adoptado un perfil fogoso en el que no faltan actitudes retadoras en el Congreso.