Los forenses descartan que la madre de Yaiza sufra un trastorno mental: «Fue un filicidio por venganza»
En cambio, la defensa de Cristina esgrime que tenía sus capacidades afectadas cuando mató a su hija de 4 años
«Hola, mariposa. Se acerca tu cumpleaños, pero todavía no he podido pensar qué podríamos hacer este año para celebrarlo. Cumplirías ocho y seguro que ya me leerías tú los cuentos y habrías empezado a multplicar y a dividir. Me hubiera gustado ayudarte. Pronto hará tanto tiempo que no te veo, como los años que pude disfrutar a tu lado. Qué pena que fueran tan pocos, Yaiza», ha apuntando el progenitor.
Y es que su hija, aquel lunes 31 de mayo, cuando su madre la mató, iba a hacer de mariposa en una función del colegio. Su disfraz estaba preparado en una silla del comedor, donde se lo había dejado su abuela. «Durante mucho tempo seguí soñando que un día abriría los ojos y te volvería a ver como si todo hubiera sido una pesadilla. Para no despertar del sueño me pasé meses y meses sin abrir la puerta de tu habitación. Pero todo esto ya lo sabes. Lo hemos hablado en el cementerio cada vez que cambio las flores», prosigue la misiva.
Tras el juicio, el padre explica que «las últimas semanas han sido muy duras». «Te tengo que confesar que he dejado un poco de lado la promesa que te hice. Sé que te dije que saldría adelante. Y lo volveré a intentar, te lo prometo. Espero que a partir de hoy sea un poco menos difícil, cuando ya sabemos la decisión del juez. Todos en el tribunal han podido ver que eras una niña maravillosa que se merecía una vida feliz, como la que tenías antes del 31 de mayo del 2021«.
Sergio ha expresado su agradecimiento al magistrado y también a los integrantes del jurado popular, «que acudieron día a día a escuchar una historia de pura maldad, que ha dejado rota a toda una familia: a los abuelos, a los tíos, a los primos, a los amigos, a las profesoras... Y gracias a los testigos: Conchi [la abuela materna], sé que tu vida también se rompió aquel día y te agradezco muchísimo que hayas defendido la memoria de tu nieta. Muchas gracias de corazón también al fiscal y a mis abogados, que han conseguido que las mentiras no tuvieran cabida en la sentencia. Y a mi psicóloga, que se me ha hecho imprescindible durante todo este tempo. Se ha hecho justicia, aunque la justicia nunca nos devolverá a Yaiza. Nunca te olvidaré, mariposa», termina.