La invasión israelí de Gaza supera los 40.000 muertos

La invasión israelí de Gaza ha superado ya la cifra de los 40.000 palestinos muertos -en su amplia mayoría mujeres y niños-, estableciendo un funesto hito que el Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Turk, dijo que suponía "un escenario sombrío para todo el mundo".

"En los últimos 10 meses, en Gaza han muerto una media de 130 personas por día. La magnitud de la destrucción de hogares, hospitales, escuelas y lugares de culto por parte del ejército israelí es profundamente impactante", señaló Turk en un comunicado.

Las cifras procedentes del Ministerio de Salud de Gaza podrían multiplicarse ya que un número indeterminado de cadáveres no han podido ser rescatados de los escombros y esos guarismos tampoco incluyen a los muertos por los efectos colaterales de la ofensiva israelí.

Según estimó la prestigiosa revista The Lancet en julio, la cifra real puede ascender a 186.000, en su mayoría fallecidos a causa de enfermedades e infecciones.

El representante de la ONU fue una de las muchas voces que instaron a que las partes enfrentadas aprovechen el reinicio de las negociaciones en Doha -que ha sido definida como la "cita de la última oportunidad"- para poner fin al conflicto.

Los contactos entre representantes de Qatar, Egipto, Israel y EEUU reunieron este jueves en la capital del primer país una plétora de altos cargos, como el jefe del Mosad israelí, David Barnea, o el de la CIA, William J. Burns. El diálogo puede durar varias jornadas.

El dirigente de Hamas Osama Hamdan afirmó desde Beirut que su formación sólo se incorporará al diálogo si se trata de implementar la propuesta que apadrinó el presidente de EEUU, Joe Biden, a finales de mayo.

Plan de la Casa Blanca

La primera fase de este plan incluiría una tregua de seis semanas, la liberación de un número indeterminado de israelíes cautivos en Gaza y de presos palestinos, la retirada del ejército de Tel Aviv de las zonas urbanas de la Franja y el regreso de la población al norte de esa región.

Pese a los ataques atribuidos a Israel en Teherán y Beirut, tanto Irán como la formación libanesa Hizbulá han retrasado su anunciada respuesta en un claro gesto destinado a no complicar aún más la crisis, que muchos analistas temen que se puede ver abocada a una devastadora guerra regional.

El liderazgo iraní ha repetido en múltiples ocasiones que responderá a la muerte del secretario general de Hamas, Ismail Haniyah, en su territorio pero el presidente de EEUU, Joe Biden, declaró esta semana que "esperaba" que la firma de un alto el fuego frene al régimen de los ayatolas.

El diario New York Times aseguró este miércoles que el Gobierno que lidera Benjamin Netanyahu presentó nuevas exigencias a finales de julio que difieren de las condiciones que parecía haber aceptado en mayo, complicando las negociaciones con Hamas. La oficina de Netanyahu no negó la veracidad de los informes filtrados al matutino pero dijo que no se tratan de nuevas peticiones sino "clarificaciones".

La misma noticia incide en los señalamientos que están lanzado diversos representantes de Tel Aviv contra el comportamiento del primer ministro, al que acusan de intentar aferrarse al poder a cualquier coste, dado que un cese de hostilidades implicaría la apertura de una crisis política que podría apartarle de su cargo.

Presión de EEUU sobre Tel Aviv

Pese a que al mismo tiempo ha intensificado su irrestricto apoyo militar a la maquinaria bélica israelí, Washington está reforzando en las últimas jornadas la presión psicológica sobre Tel Aviv canalizando informaciones a través de medios como el citado NYT que cuestionan la actitud de Netanyahu y ofrecen un análisis sobre la realidad de Gaza muy distinto al que pretende ofrecer el Ejecutivo israelí.

Este miércoles portavoces del ejército estadounidense y de los propios uniformados de Israel admitieron que las fuerzas armadas de este último país no serán capaces de recobrar a los rehenes ni de acabar con Hamas continuando la arremetida, pese al daño que han causado al grupo armado.

El propio ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, se enredó en un significativo encontronazo público con Netanyahu cuando criticó al jefe del ejecutivo que sigue prometiendo una "victoria total" en la pugna con los paramilitares palestinos.

"Escucho a todos esos héroes golpeando los tambores de la guerra, la victoria total y todo ese sin sentido", señaló Gallant, según publicaron los medios israelíes.

Netanyahu replicó de inmediato diciendo que su ministro está adoptando "una narrativa anti israelíes" en una enésima prueba de la profunda rivalidad que enfrenta a ambos políticos.

El titular de Defensa fue uno de los que señaló a Netanyahu como responsable del retraso para alcanzar un pacto que permita recuperar a los cautivos en Gaza. "La razón de que el acuerdo se haya estancado es en parte por Israel", dijo el pasado lunes, según también los medios de su país.