El FMI mejora en medio punto el crecimiento para España en 2024, hasta el 2,4%, pero alerta sobre el paro estructural
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha elevado este jueves al 2,4% su previsión de crecimiento económico para España en 2024, una mejora de medio punto respecto al 1,9% que había pronosticado el pasado mes de abril, pero ha alertado sobre el problema de paro estructural en el país, que sigue siendo el más alto de toda la zona euro.
Según la revisión del Artículo IV para nuestro país, publicada este jueves, el FMI explica que la mejora de las previsiones de sebe al tirón de la demanda interna y el consumo privado, que se fortalecerá a medida que la tasa de ahorro de los hogares se normaliza gradualmente y los ingresos salariales reales siguen aumentando de manera sostenida. Según el organismo, se ha moderado la incertidumbre sobre el crecimiento de la economía española, pero todavía persisten riesgos a la baja como la fragmentación política interna, una posible mala ejecución de los fondos Next Generation y una desaceleración global que no puede descartarse.
Aunque elogiaron "la disminución sin precedentes del empleo temporal" fruto de la reforma laboral de 2021, advirtieron de que "el desempleo estructural sigue siendo el más alto de la zona del euro" y alentaron a "reducir aún más el dualismo del mercado laboral".
"Tenemos que seguir trabajando en la reducción del paro estructural para llegar al pleno empleo y para que la mejora de la inversión se traduzca en una mejora de la productividad sobre todo para las pymes", ha admitido Carlos Cuerpo, ministro de Economía, quien ha señalado que su valoración de la revisión de las previsiones es "satisfactoria".
El propio ministro ha admitido que "esas previsiones están muy por encima de las propias del Gobierno. El FMI se suma así a una larga lista de organismos que han venido actualizando al alza sus previsiones", ha señalado, y ha valorado además que esta institución confíe en que se va a producir una mejora en la inversión, impulsada por los fondos europeos.
El FMI ha insistido en que España necesitará en los próximos años un plan de "consolidación fiscal sostenida" centrado en "reducir las ineficiencias tributarias y ampliar la base impositiva para reconstruir las reservas fiscales y mantener la deuda en una trayectoria descendente". Además, creen que los impuestos extraordinarios a la banca y las energéticas deben estar bien diseñados: "garantizar que los impuestos sobre las ganancias inesperadas a los bancos y las empresas de energía, si se hacen permanentes, estén diseñados apropiadamente para minimizar posibles distorsiones".
En el ámbito financiero, los directivos remarcaron que se debe aumentar las reservas de capital de los bancos y "acogieron con agrado" las intenciones del Banco de España de aumentar el colchón de capital anticíclico.
Para 2025 mantienen un pronóstico de crecimiento del 2,1%, así que en conjunto sus previsiones superan a las del Gobierno español, que estima una subida del PIB del 2% en 2024 y del 1,9% en 2025.
En cuanto a la inflación, el organismo que dirige Kristalina Georgieva prevé que disminuirá aún más a lo largo de 2024 y 2025, acercándose al objetivo del 2%. "Prevén una moderación gradual tanto para 2024 como para 2025, es un patrón de crecimiento equilibrado. Somos capaces de crecer por encima de nuestros socios, vamos a crecer tres veces por encima del área euro, según el FMI, y eso va a ser compatible con la moderación gradual de la inflación que permite que se recupere el poder adquisitivo", ha apuntalado Cuerpo.