Díaz asegura que la reducción de la jornada "no es una medida económica" y los sindicatos amenazan con movilizaciones si el Congreso bloquea la ley
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha asegurado este viernes que la reducción de la jornada laboral "no es una medida económica". Así se ha pronunciado durante la rueda de prensa en la que ha presentado el acuerdo alcanzado con los sindicatos tras una semana de enfrentamiento público con el Ministerio de Economía.
En su intervención, sin citar al titular de Economía, Carlos Cuerpo, la vicepresidenta ha afirmado que la reducción de la jornada laboral "no es una medida económica, como piensan algunos". Acto seguido ha asegurado que desde la aprobación de la jornada laboral de 40 horas semanales hace 40 años la productividad en España ha crecido más de un 50% y ha asegurado que es el momento de "repartir" esa productividad entre los trabajadores.
"Trabajar menos no puede ser una prerrogativa sólo de la banca, de las consultoras, de los empleados públicos o de las grandes empresas, se acabó que tengamos trabajadores de primera y de segunda, tiene que ser un derecho que alcance a las cajeras de los supermercados, a las dependientas, a los camareros o a la gente de la limpieza", ha incidido Díaz.
La ministra de Trabajo ha destacado que España es "la economía que más crece en la OCDE y en la Unión Europea" y ha presumido de que este liderazgo se debe a las políticas laborales del Gobierno. "Hemos cambiado el paradigma y ahora es el trabajo el que tira de la economía", ha destacado, para asegurar que "más estabilidad en el empleo, más salarios y más salario mínimo hace que la economía crezca".
"Para esto vale la pena estar en política y partirse la cara", ha dicho la vicepresidenta en una rueda de prensa que se produce tras la escalada de tensión dentro del propio Gobierno por las reticencias del área económica que lideran los socialistas y después de prácticamente un año de complejas negociaciones con los sindicatos y la patronal, que finalmente no ha firmado el acuerdo.
Con todo, los sindicatos han invitado a los empresarios a volver a sentarse a negociar. "Tienen la oportunidad de continuar hablando", ha anunciado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quien ha avanzado que hoy no se cierra un acuerdo, sino que se "abre un proceso". "Somos plenamente conscientes de que será complejo", ha reconocido el líder sindical, que ha admitido que ahora arrancan las negociaciones para intentar "configurar una amplísima mayoría en el Congreso".
En este sentido, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, también ha reconocido que sería "más efectivo" un acuerdo con la patronal en materia de reducción de jornada y se ha mostrado "consciente" de las dificultades que plantea la tramitación. "Es posible que el texto pueda sufrir modificaciones y de que la CEOE también va a jugar su papel y va a presionar", ha advertido el líder sindical, que ha avanzado que harán "seguimiento".
Ante este incierto escenario, Sordo ha vaticinado incluso que "no es imposible que la norma acabe siendo bloqueada en la Cortes". Aunque ha reconocido la "legitimidad" para hacer aportaciones de los grupos parlamentarios, con quienes los sindicatos ya están en negociaciones, ha avisado de que "CCOO va a defender la literalidad de lo acordado" y ha advertido de que no descartan "movilizaciones" si el Congreso bloquea la ley. "Hoy es un día importante, pero no es el final de nada", ha dicho.