Tratado en Inglaterra el primer paciente con una vacuna personalizada contra el cáncer de colon>
Elliot, profesor de educación superior, no presentaba síntomas de cáncer y fue diagnosticado durante un chequeo de rutina con su médico de cabecera. Después, fue remitido al Manor Hospital en Walsall, donde fue sometido a una cirugía para remover un tumor y 30 centímetros de su intestino grueso. Luego, fue derivado al Queen Elizabeth Hospital de Birmingham para iniciar la quimioterapia y para participar en el ensayo clínico de las vacunas.
«Participar en este ensayo coincide con mi profesión como docente y como persona centrada en la comunidad. Quiero impactar positivamente en la vida de otras personas y ayudarlas a alcanzar su potencial. Si este ensayo tiene éxito, podría dar esperanza a miles, si no millones, de personas para que no experimenten lo que yo he pasado. Espero que esto ayude a otros», comentó Phebve.
El ensayo clínico en el que participa este profesor es uno de los muchos que se llevarán a cabo en hospitales del NHS en todo el país para tratar diferentes tipos de cáncer. Se espera que miles de pacientes se beneficien del nuevo Cancer Vaccine Launch Pad del NHS Inglaterra, que permitirá a aquellos que deseen participar en ensayos clínicos ser dirigidos rápidamente a uno de los hospitales participantes más cercanos.
Los pacientes que acepten participar y que cumplan con los criterios de elegibilidad del ensayo clínico, serán referidos al sitio del NHS participante más cercano, lo que facilitará que los pacientes de hospitales de todo el país participen en este avance pionero.
Las vacunas experimentales contra el cáncer evaluadas en el ensayo del cáncer colorrectal se basan en ARNm, la misma tecnología utilizada para la vacuna contra la Covid-19 de Pfizer-BioNTech. Estas vacunas se crean analizando el tumor de cada paciente para identificar las mutaciones específicas de su cáncer.
Usando esta información, los médicos crean una vacuna experimental individualizada contra el cáncer, diseñada para inducir una respuesta inmunitaria que pueda prevenir el regreso del cáncer después de la cirugía del tumor primario, al estimular el sistema inmunológico del paciente para reconocer y potencialmente destruir cualquier célula cancerosa restante.
Las vacunas experimentales contra el cáncer, desarrolladas conjuntamente por las compañías biofarmacéuticas BioNTech y Genentech, miembro del Grupo Roche, aún están en fase de ensayos y no han sido aprobadas por los reguladores.
NHS está en una posición única
Treinta hospitales en Inglaterra ya se han inscrito en el pionero Cancer Vaccine Launch Pad, uno de los proyectos más grandes de su tipo en el mundo. El esquema pretende expandirse y trabajar con una variedad de socios en la industria farmacéutica para incluir a pacientes con muchos tipos de cáncer.
«Ver a Elliot recibir su primer tratamiento como parte del Cancer Vaccine Launch Pad es un momento histórico para los pacientes y para el servicio de salud, mientras buscamos desarrollar formas mejores y más efectivas de detener esta enfermedad», declaró Amanda Pritchard, directora ejecutiva del NHS, que agregó que «gracias a los avances en el cuidado y tratamiento, la supervivencia al cáncer está en su punto más alto en este país, pero estos ensayos de vacunas podrían algún día ofrecernos una forma de vacunar a las personas contra su propio cáncer para ayudar a salvar más vidas».
En su opinión, «el NHS está en una posición única para llevar a cabo este tipo de investigación de clase mundial a gran escala, y a medida que más de estos ensayos se pongan en marcha en los hospitales de todo el país, nuestro servicio nacional de emparejamiento asegurará que la mayor cantidad posible de pacientes elegibles tenga la oportunidad de acceder a ellos».
El profesor Peter Johnson, director clínico nacional de cáncer del NHS, detalló por su parte que «sabemos que incluso después de una operación exitosa, los cánceres pueden volver porque algunas células cancerosas quedan en el cuerpo, pero usar una vacuna para atacar esas células restantes puede ser una forma de evitar que esto suceda» y por ello, «el acceso a ensayos clínicos podría proporcionar otra opción para los pacientes y sus familias, y estoy encantado de que a través de nuestra plataforma nacional estemos ampliando las oportunidades de participar en estos ensayos para muchas más personas, con miles de pacientes que podrían ser reclutados durante el próximo año».
La investigadora principal del ensayo en el Queen Elizabeth Hospital Birmingham, la oncóloga Victoria Kunene, comentó que «las vacunas experimentales contra el cáncer se basan en ARNm y se crean analizando el tumor de un paciente para identificar mutaciones específicas de su cáncer. Usando esta información, podemos crear una vacuna experimental individualizada contra el cáncer, pero es demasiado pronto para decir si serán exitosas, aunque somos extremadamente optimistas».
«Basándonos en los datos limitados que tenemos actualmente sobre la respuesta en el cuerpo a la vacuna, esto podría resultar ser un desarrollo significativo y positivo para los pacientes, pero aún se necesitan más datos y continuamos reclutando pacientes adecuados para el ensayo para establecer esto más a fondo», reconoció.