La Cumbre del Clima se va a la prórroga tras ser incapaz de lograr un acuerdo sobre los combustibles fósiles>

Este martes está siendo de reuniones a puerta cerrada y mutismo por parte de los delegados de los países, que han ido cancelando una a una todas las ruedas de prensa que había previstas para la jornada. Puertas adentro se debate cuál es la urgencia con la que los estados deberían actuar contra el cambio climático y qué medidas tomar. Decidir qué hacer con el petróleo, el gas y el carbón, cuyo consumo supone la principal fuente antropogénica de gases de efecto invernadero, está este año en el centro de las conversaciones. El acuerdo que salga de esta cumbre orientará los futuros planes de reducción de emisiones de los países. De ahí la importancia de esta cumbre y de cada palabra que figura en los textos.

En la primera propuesta de acuerdo, publicada el lunes tras dos semanas de conversaciones, la presidencia de la COP28 proponía «reducir» (no eliminar) el «consumo y producción» de los combustibles fósiles, algo que en 28 ediciones de conversaciones climáticas todavía no se ha logrado. Sin embargo, apenas era una de las posibles medidas con la que los países podían recortar los gases de efecto invernadero. A esa reducción para lograr una energía de emisiones «cero netas» para 2050 también se sumaban otras opciones como triplicar renovables a 2030 o «reducir» rápidamente el uso del carbón que no vaya acompañado de tecnologías captura de carbono.

El descontento de más decenas de países fue patente de inmediato. Rechazaron el texto la UE, EE.UU., Australia, Japón, los pequeños países insulares. Reclamaron endurecer el lenguaje: dejaba abierta la posibilidad de que el recorte de emisiones no sea suficiente para detener el calentamiento global en 1,5 grados. Los científicos aseguran que las emisiones tendrían que caer en un 43% para 2030 o será demasiado tarde. Ahora mismo, la caída proyectada para esa fecha es del 2%. Pero países como China

«Al publicar nuestro primer borrador del texto, logramos que las partes vinieran rápidamente a nosotros con sus líneas rojas«, se justificó este martes el director general de la COP28, Majid al-Suwaidi. »En esta COP estamos tratando de hacer algo que nunca se ha hecho antes, algo histórico... Parte de esto es incluir los combustibles fósiles en el texto. Si podemos, eso sería histórico«, dijo. No obstante, pidió también flexibilidad y mirar el conjunto del texto. Más de 24 horas después de haber publicado el primer borrador de acuerdo, y con el tiempo ya en contra, los países siguen esperando.