La viruela del mono vuelve a ser una emergencia global, ¿qué significa? ¿a qué nos enfrentamos?

 

¿Por qué ahora?

El virus mpox no ha dejado de circular en Occidente desde que se declaró el brote epidémico de 2022. Entonces afectó a casi 100.000 personas de 116 países y causó a unas 200 personas, principalmente hombres con prácticas sexuales de riesgo y varones que tenían relaciones con otros hombres. La vacunación contuvo el brote y se retiró la emergencia en mayo de 2023. Pero el temor a una nueva variante del virus, más agresiva que la anterior, ha llevado a la Organización Mundial de la Salud a declarar la alerta. Se trata del mayor brote detectado hasta ahora y está generando mucho sufrimiento en la población más vulnerable de África, como niños y embarazadas. El organismo sanitario cree que «una respuesta internacional coordinada es esencial para detener estos brotes y salvar vidas», como explicó el jueves Tedros Adhanom, director de la OMS.

¿Para qué sirve este mecanismo?

La declaración de emergencia internacional lleva aparejadas respuestas de emergencia en países de todo el mundo para frenar su expansión, en virtud del reglamento sanitario internacional. No se trata de una formalidad técnica sino de una verdadera llamada a la acción que pasaría además por un aumento de la producción de vacunas de la viruela humana, la única herramienta que puede frenar su expansión. Tanto en España como en otros países europeos y de Estados Unidos, durante el primer brote se vacunó a la población de mayor riesgo. En la RDC no existe aún un plan de vacunación.

¿Cómo nos puede afectar?

El mundo es global, pero no todos los países están igual de preparados para afrontar una epidemia. La mejor opción es detener la transmisión lo antes posible en el lugar de origen. «En España no debemos alarmarnos, aunque sí estar atentos y en alerta. Este tipo de infecciones se están globalizando y solo debemos aprender a reconocerlas para protegernos», tranquiliza María Velasco, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc). La declaración de la Organización Mundial de la Salud es una llamada para dotar de recursos a los países afectados para contener su expansión. «Esto es como un boomerang, lo que no tratamos y controlamos en origen nos va a llegar de alguna manera», explica.

La decisión de la OMS también llevará aparejadas medidas en Europa. Tras la declaración, el Comité de Seguridad Sanitaria de la UE ha convocado a los países miembros el próximo día 19 de agosto para poner en común para discutir las actuaciones que se deriven de la alerta.

¿La amenaza ahora es mayor?

Sí. La mutación que se está extendiendo en el continente africano se transmite con más facilidad y tiene una mayor tasa de letalidad. Clásicamente, se considera que existen dos variantes de la viruela del mono: la más grave, que circula por la cuenca del Congo que es del grupo filogenético clado 1, y la menos agresiva, del clado 2, que circula por África Occidental. Esta última, más leve, es la que sigue circulando por Europa y en España, la misma que causó el brote en 2022. La que se extiende como la pólvora en el continente africano es una mutación de la cepa más grave, el clado 1b, con una mortalidad del 3 por ciento. Una de las cosas que más ha llamado la atención de la organización sanitaria es que esta cepa se transmite con facilidad por contacto sexual, pero falta mucha investigación. Según la OMS, podría no tratarse de un único brote de un clado, sino de varios en países diferentes con modos de transmisión y niveles de riesgo diferentes. Y esto es lo que aún se necesita averiguar.

¿Funcionan las vacunas?

No existe una vacuna específica para mpox. Se utiliza la vacuna de la viruela humana, un fármaco que salió de las campañas de vacunación en 1980 tras la erradicación de la enfermedad. Esta vacuna no está diseñada específicamente, pero las personas inmunizadas contra la enfermedad humana están protegidas, por eso la mayoría de los casos se han visto en personas de más de 40 años. La vacuna tradicional se utiliza en dos dosis, como prevención y también en caso de exposición. Solo dos farmacéuticas las fabrican. Se necesitarían diez millones para la población africana. Hay medio millón en reserva y otras 2,4 millones podrían ser fabricadas hasta final del año. Además, la OMS está en contacto con países que tienen reservas para recibir donaciones

¿Cómo son los síntomas?

Los síntomas son similares a los del primer brote. La infección puede producir fiebre, síntomas respiratorios, dolores musculares y la inflamación de nódulos linfáticos. Pero lo más llamativo son las lesiones en la piel que se extienden por las manos, los pies, el tórax, la boca o los genitales.