Pero no solo en esta especialidad se observan los problemas, lamenta Roviralta, que se refiere a otras que van a tener que echar el cierre a sus consultas a lo largo del verano. «Estamos sin digestivo, que es una especialidad vital, pero también sin servicios como dermatología, que actualmente está cerrado por vacaciones. Y con Endocrinología pasará igual, porque son servicios unipersonales porque no se encuentran médicos o si vienen, ven las condiciones y se van», dice. En oncología se sufre el déficit de profesionales, asegura el también presidente del Sindicato Médico de Ceuta, pues solo hay dos especialistas para todo el territorio, de manera que cuando uno se va de vacaciones es el otro el que tiene que asumir todo el trabajo.
En atención primaria, afirma este facultativo, la situación no es mucho mejor, y más a las puertas de un verano que se espera más complicado que los anteriores, con médicos que tienen que doblar turnos para no dejar a la población desatendida -que en estas fechas se multiplica- y que ya de por sí tienen agendas sobrecargadas. También en Melilla es en los centros de salud donde más están notando la falta de profesionales. «Quizá nunca ha estado tan mal como ahora. Este verano es peor que el anterior, porque otros años sí que ha habido algún contrato para reforzar urgencias, pero este verano no hay ninguno porque no hay médicos», critica César Feliu Serrano, vocal del Sindicato Médico de Melilla y secretario del colegio de médicos de la ciudad autónoma.
En concreto, explica este pediatra, en los cuatro centros de salud de la ciudad autónoma hay entre tres y cuatro médicos de vacaciones sin que se cubra su puesto. A eso se suman además algunas bajas. «Estamos hablando de que falta prácticamente la mitad de la plantilla y son el resto de compañeros los que tienen que asumir esos cupos, lo que supone una sobrecarga asistencial brutal. Y además no hay nadie del que tirar para cubrir los puestos», explica Feliu. La situación «más dramática», dice, se da en pediatría: «Todos los centros de salud están en el mejor de los casos al 50 por ciento y hay días que no llegamos ni al 30 por ciento». De hecho, Feliu atiende a ABC desde su lugar de trabajo pese a que le tocaba librar, pues en el momento de la conversación no había suficientes profesionales en el centro.
Un otorrino y dos oncólogos
Y en los hospitales de Melilla, apunta el vocal del colegio de médicos, también hay servicios bajo mínimos, como otorrinolaringología o ginecología. «Solo tenemos un otorrino en plantilla y cuando se vaya de vacaciones probablemente se cerrará el servicio. En otros servicios hay dos, como en oncología, y lo que hacemos es intentar coger las vacaciones de tal manera que la continuidad asistencial se mantenga, pero uno puede ponerse enfermo, y si eso ocurre esa baja no se va a cubrir», critica. Si la atención a los pacientes se mantiene, incide Feliu, es porque los profesionales hacen «esfuerzos sobrehumanos»: «Si se mantiene garantizada la asistencia es porque muchos de los médicos renunciamos a días para echar una mano».
Los pacientes se ven en ocasiones obligados a desplazarse hasta Málaga para poder ser atendidos en determinados servicios. «Hay listas de espera inasumibles, como es el caso de digestivo. Solo tenemos un par de médicos haciendo colonoscopias y la lista de espera es muy grande, así que quien se lo puede permitir se va a Málaga a hacerse las pruebas», cuenta el médico melillense. Si no llegan más facultativos para trabajar en el territorio, advierte, estas listas de espera continuarán incrementándose.
Zonas de difícil cobertura
Tanto Ceuta como Melilla están declaradas como zonas de difícil cobertura, es decir, territorios que no resultan atractivos para los médicos y por tanto en los que encontrar profesionales que desarrollen su labor resulta muy complicado. Fue en febrero de 2023 cuando el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó esa declaración, que implica medidas, como incentivos económicos, para reclutar a facultativos. Pero los médicos denuncian que estas soluciones todavía no han llegado.
«No se ha aplicado ni una sola medida», denuncia el presidente de los médicos de Ceuta, que recuerda que la ausencia de esas medidas fue el principal motivo por el que el año pasado los sanitarios de esta ciudad autónoma y de Melilla estuvieron durante meses en huelga, que suspendieron de forma temporal ante la llegada de Mónica García al Ministerio de Sanidad «como acto de buena fe». «Tenemos un problema muy serio, es una zona de muy difícil cobertura pero que Ingesa desgraciadamente no aplica», espera Roviralta. El secretario del Colegio de Médicos de Melilla va más allá: «No solo no se ha aplicado ninguna medida, sino que entendemos que las que se plantean no son las adecuadas y no recogen el espíritu de una zona de difícil cobertura para médicos. Lo han convertido en una suerte de complemento para todos los sanitarios cuando lo cierto es que las únicas bolsas de trabajo que están a cero son las de los médicos. Hay enfermeras y hay auxiliares para cubrir vacaciones, lo que no hay son médicos», denuncia. Reprocha además que la mayoría de las comunidades autónomas sí han puesto en marcha estas medidas pese a que Ceuta y Melilla fueron de las primeras en declararse zonas de difícil cobertura. «Nos llevan una ventaja abismal», zanja Feliu.
Sin embargo, el Ingesa asegura que la experiencia que tiene en la gestión de las ciudades autónomas garantizará la plena cobertura de la demanda asistencial y los servicios de los centros de salud y hospitales no se verán afectados durante el verano. En un comunicado, el organismo, dependiente del Ministerio de Sanidad, defiende que se encuentra en mejores condiciones respecto a hace diez años para atender a la población de Ceuta y Melilla. «En 2014, los servicios disponían de 374 facultativos, mientras que a comienzos de 2024 este número se ha situado en 448: 74 especialistas más en atención primaria y en los hospitales para atender a un volumen de población constante, es decir, un 20% más de médicas y médicos», dice la nota.
Visita a Melilla
Hace un mes la nueva directora general del Ingesa, Isabel Muñoz, estuvo en Melilla por la construcción de un nuevo hospital que se pondrá en marcha en los próximos meses y pudo conocer de primera mano la situación. «La impresión que nos dio fue muy buena, pero a efectos prácticos de lo que dijeron que iban a hacer no vemos resultados. En cuanto a nivel de gestión estamos peor que nunca», critica Feliu, que recuerda que de poco sirve contar con un hospital puntero si no hay profesionales que ejerzan en él. «Creo que están trabajando, pero no van con toda la rapidez que nos gustaría», señala. Los médicos ceutíes, sin embargo, todavía no han tenido la ocasión de conocerla.
Sanidad defiende que desde 2014 ha aumentado un 20% el número de médicos en el conjunto de ambas áreas sanitarias
Pero el Ingesa asegura que los sistemas sanitarios de las ciudades autónomas cuentan con una planificación sobre las sustituciones de los profesionales que se vayan de vacaciones. Este plan, recoge el citado comunicado, «permitirá responder a la demanda de la ciudadanía de forma adecuada manteniendo la seguridad clínica y la satisfacción de los pacientes». En los servicios donde solo hay un médico, expone, «las actividades programadas se organizarán adaptándose en tiempo real a los recursos disponibles».
Precisamente ayer, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) denunció la «crítica situación» de los sistemas sanitarios de Ceuta y Melilla y criticó «la falta de predisposición del Ministerio de Sanidad para abordar el problema desde la colaboración mutua y el conocimiento real de la situación». En un comunicado, reclamó medidas urgentes para poner fin a esta situación.