Preocupación unánime y rechazo mayoritario de Asia ante el ataque de Israel a Irán

«China sigue de cerca los ataques de Israel contra Irán y está profundamente preocupada por las posibles consecuencias graves de estas acciones», ha declarado el portavoz del Ministerio de Exteriores esta tarde durante la rueda de prensa diaria del organismo. «China se opone a cualquier violación de la soberanía, la seguridad y la integridad territorial de Irán, y rechaza las acciones que escalen las tensiones y amplíen el conflicto».

El representante gubernamental, sin embargo, ha evitado adelantar si China apoyaría a Irán en un hipotético bloqueo del estrecho de Ormuz, tal y como el régimen islámico advirtió que haría en caso de ataque. «Una intensificación repentina de la situación en la región no beneficia a ninguna de las partes. Instamos a todas las partes involucradas a hacer más por promover la paz y la estabilidad en la región y a evitar una mayor escalada de tensiones. China está dispuesta a desempeñar un papel constructivo en favor de la desescalada», ha añadido Ma.

Las misiones diplomáticas del gigante asiático en Israel e Irán han emitido una alerta a los ciudadanos chinos residentes en ambos países. Los avisos recomiendan que, dada la situación «compleja y severa», estos extremen las medidas de precaución y eviten salidas innecesarias al exterior, en especial en zonas próximas a complejos militares.

La cautela ha caracterizado también el desempeño de las bolsas asiáticas, cuyos índices han registrado caídas con carácter generalizado. El crudo, por contra, ha experimentado a lo largo de la jornada marcados repuntes de hasta el 6%.

Otros países

Pese a las diferencias geopolíticas e ideológicas con su vecino, Japón se ha expresado en términos similares. «Condenamos enérgicamente esta última acción que agrava la situación», ha afirmado esta mañana en rueda de prensa su ministro de Exteriores, Takeshi Iwaya. «La paz y la estabilidad en la región de Oriente Próximo son de suma importancia para Japón, y exhortamos a todas las partes involucradas a actuar con la máxima moderación y a calmar la situación».

El recién elegido presidente surcoreano, Lee Jae-myung, ha convocado una reunión de emergencia en la que ha establecido como primera prioridad «las vidas y la seguridad [...] de nuestros nacionales afincados allí». Mientras que Australia se ha manifestado «alarmada ante la escalación», por boca de su ministra de Exteriores, Penny Wong. «Esto conlleva el riesgo de desestabilizar aún más una región que ya es volátil».

India, por su parte, ha hecho gala de mantener «relaciones estrechas y amistosas con ambos países» al tiempo que se ha mostrado «dispuesta a brindar todo el apoyo posible». «Estamos profundamente preocupados por los recientes acontecimientos entre Irán e Israel», rezaba el comunicado oficial. «India insta a ambas partes a evitar cualquier medida que pueda escalar la situación. Deben utilizarse los canales existentes de diálogo y diplomacia para trabajar hacia una desescalada del conflicto y la resolución de los problemas subyacentes».

Tal y como cabría esperar, las críticas más vehementes proceden de los países musulmanes de la región. «Este acto ilegal socava los propios cimientos del derecho internacional», ha protestado Indonesia mediante un comunicado emitido por su ministerio de Exteriores. «El ataque corre el riesgo de agravar las tensiones regionales existentes y podría desencadenar potencialmente un conflicto más amplio».

«Condeno, en los términos más enérgicos posibles, los ataques militares israelíes en Irán, incluidos los ataques selectivos que han causado la muerte de altos líderes iraníes. Este es un acto grave e imprudente, que amenaza con desestabilizar aún más una región frágil», ha afirmado en redes sociales el primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, quien no ha dudado en añadirles una motivación. «Su objetivo claro es sabotear las negociaciones en curso entre Estados Unidos e Irán. También ocurre en un momento de renovado escrutinio sobre la conducta de Israel en Gaza y una creciente presión política sobre [el primer ministro israelí] Benjamin Netanyahu».