Pedro Sánchez y los primeros ministros de Bélgica, Irlanda y Malta piden a Europa que exija un alto el fuego en Gaza
El primer ministro belga Alexander de Croo (que sucederá a Sánchez en la presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea a partir del 1 de enero), el irlandés Leo Varadkar y el maltés Robert Abela son los únicos líderes europeos que han firmado esta carta.
En la misiva, solicitan introducir en el orden el día Consejo europeo que se va a celebrar la próxima semana «un debate serio sobre lo que está ocurriendo en Oriente Medio con el objetivo de que la Unión Europea pacte una posición clara y común sobre el conflicto». España es uno de los pocos países que ha expresado su intención firme de reconocer a Palestina como Estado, como una posible vía de pacificación del conflicto.
Aseguran que se toma esta decisión tras la activación del artículo 99 por parte de Antonio Guterres, el Secretario General de la ONU, para que el Consejo de Seguridad «se ocupe de la catástrofe humanitaria en Gaza», toda vez que reiteran «su rotunda condena de los ataques terroristas cometidos por Hamás el 7 de octubre y piden la inmediata liberación de los rehenes» y «el derecho de Israel a defenderse, de acuerdo con el Derecho Internacional y del Derecho Humanitario».
Las peticiones a la UE
Los firmantes reciben como una buena noticia la pausa humanitaria que se ha vivido, pero piden a la UE que vaya más allá, en concreto en tres aspectos:
Pedir de manera urgente a las partes que declaren un alto el fuego humanitario duradero que pueda conducir al fin de las hostilidades.
Hay que adoptar de inmediato medidas eficaces para proteger a civiles inocentes. Los firmantes expresan su profunda preocupación por el insoportable nùmero de bajas en Gaza. La ayuda humanitaria debe llegar a los que la necesitan de manera sostenida y en cantidad suficiente. Recuerdan que impedir que la llegada de ayuda a los civiles puede contravenir el derecho internacional.
Es necesario y urgente abrir un proceso politico para materializar la solución de los dos Estados. Advierten de que no se puede regresar al statu quo anterior al 7 de octubre. Es necesario proporcionar el apoyo financiero y político adecuados a la Autoridad Palestina para que tome el control de Gaza. Esto es vital, aseguran, también para la seguridad de Israel.
También proponen «prohibir los desplazamientos en zonas puntuales y la congelación de activos de colonos violentos que están atacando a las comunidades de palestinos desplazados».
Todo ello debería desembocar, según piden, en una convocatoria para una conferencia internacional de paz «tan pronto como sea posible para materializar la solución de los dos Estados».
«La perspectiva creíble del reconocimiento de un Estado Palestino, junto al Estado de Israel, es la base para el avance hacia el reconocimiento mutuo, la paz y la seguridad en la región», argumentan, toda vez que advierten del resurgimiento de «incidentes antisemitas» por todo el continente europeo.