El Gobierno se divide en la reforma del CGPJ que el PSOE pactó con el PP: Sumar no la apoyará
Grietas en el Gobierno de coalición en la primera prueba de estrés tras el acuerdo de renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) entre el PSOE y el PP. Los dos socios del Ejecutivo se dividirán en la primera votación al respecto en el Congreso. En concreto, en la admisión a trámite de la reforma de la ley del Poder Judicial que forma parte del paquete que suscribieron los dos grandes partidos y que acompaña la lista de nombramientos de los nuevos vocales.
Fuentes oficiales de Sumar han informado de que el grupo parlamentario de Yolanda Díaz se abstendrá en la votación que se celebrará este jueves en la Cámara, y cuyo único fin es permitir que comience la tramitación parlamentaria de la proposición de ley presentada por socialistas y populares. Así pues, por parte del Gobierno el PSOE votará a favor de la admisión, lógicamente, pero Sumar no la apoyará. Cierto es que los 27 votos del socio minoritario no son determinantes en dicha votación porque PSOE y PP alcanzan de calle la mayoría absoluta del Congreso y tienen garantizado el éxito.
Sumar, que sigue muy enfado con el PSOE porque se enteró del contenido último del texto una vez que estaba "cerrado" y "registrado" en el Congreso, considera "insuficientes" las medidas que contiene la proposición de ley para "democratizar" la Justicia y, en consecuencia, se apea de dar su respaldo a pesar de que por vía indirecta forma parte del acuerdo con el PP. Esta posición anticipa lo que puede suceder en unas semanas cuando se dé en el Pleno del Congreso la votación definitiva. Pues una parte del acuerdo entre el PSOE y el PP implica no aceptar ninguna enmienda de los grupos y, por tanto, Sumar no podrá añadir nada nuevo.
Fuentes del grupo de Díaz admiten que hay medidas de la iniciativa que son "correctas" pero al mismo tiempo subrayan que no alcanzan su ambición por ir más allá ante esta oportunidad. "Nos habría gustado avanzar más en la democratización del Estado y, al no haber opción de enmendar, nos abstendremos en esta proposición de ley", señalan.
Ya el pasado jueves el portavoz de Sumar, Íñigo Errejón, había dejado en el aire los votos de Sumar porque ni era el "camino" ni eran las "formas" de actuar con ellos. Y, sobre todo, porque la reforma del CGPJ se quedaba corta por mucho que añada incompatibilidades sobre el tiempo que tiene que transcurrir para que se pase de la política a la Justicia o viceversa.
"Hay una democratización pendiente que tiene que ver con el acceso a la Justicia, con quién consigue llegar a juez, con las mayorías necesarias para evitar bloqueos, con las funciones" del CGPJ, relataba entonces Errejón en su argumentación. "La agenda de regeneración democrática con el Estado con la que el propio presidente del Gobierno se comprometió no se agota con un acuerdo PSOE-PP", recalcó.
Ahora, pasados unos días de digestión, el malestar en Sumar continúa. "Hemos participado de la renovación de los vocales del CGPJ, pero también queremos advertir de que el camino a la democratización del Estado no es con el PP, sino con la mayoría de la investidura", dicen hoy fuentes oficiales de Sumar.
La coalición de Yolanda Díaz participa en el acuerdo de renovación con el PP a través del PSOE, que fue quien negoció su cuota dentro del CGPJ. Se concretó en dos nombramientos: Carlos Hugo Preciado, magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, y la fiscal Inés Herreros, que actualmente está en Memoria Democrática.
Mientras Sumar se abstiene, Podemos se lanza a hacer oposición frontal al pacto PSOE-PP en todos los ámbitos que puedan. Fuentes del partido morado valoran "muy negativamente" el rumbo de la legislatura y consideran que este jueves "se consagrará" la decisión del PSOE "de cambiar de socios, apartándose de la mayoría de la investidura y optando por construir una gran coalición bipartidista con el PP".
"El pacto para el CGPJ, y los acuerdos PSOE-PP ya anunciados y que están por llegar (Banco de España, CMNC, CNMV, RTVE, etc), abren una nueva etapa política que se aleja del mandato de las urnas en las generales de 2023 y que anticipa una senda de freno a los avances y recortes", denuncian desde Podemos.
Respecto al CGPJ y la reforma de la ley, estas fuentes moradas avisan de que va a "conferir poder de veto sobre cualquier nombramiento o decisión a los vocales conservadores" y "va a impedir la democratización" de la Justicia y "va a legitimar la guerra sucia judicial, bloqueando la posibilidad de que los jueces que han participado en ella rindan cuentas". Para Podemos, esto es "especialmente grave".