Yolanda Díaz advierte del "riesgo sistémico" de la fusión de BBVA y Sabadell mientras el consejo del banco de Oliu estudia hoy la oferta
Día clave para la posible fusión de BBVA y Sabadell. El consejo de la entidad catalana se reúne hoy para abordar la oferta que Carlos Torres puso sobre la mesa la semana pasada y, previsiblemente, tomará una decisión sobre si aceptarla -y en qué términos- o rechazarla. Mientras tanto, algunas voces políticas ya se han pronunciado sobre el impacto que tendría la operación. Es el caso de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, que ha advertido esta mañana del "riesgo sistémico" que implicaría por la concentración de entidades en España.
"Estamos en una concentración en torno al 40% y ahora estaríamos en el 70%. Por tanto, hay riesgo sistémico en la configuración de las entidades financieras en nuestro país", ha asegurado la responsable de la cartera de Trabajo en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press. "Manifiesto muchísima preocupación por esta operación, miremos para Europa, el riesgo de concentración existe y además es que están funcionando como un auténtico oligopolio ya hoy en España", ha subrayado.
Otra de las preocupaciones de Díaz ante una eventual fusión de BBVA y Sabadell es qué pasará con las plantillas de ambas entidades. "A mí me parece mal que estén pujando por hacer expedientes de regulación de empleo", ha criticado la vicepresidenta, que ha señalado que incluso ya se han cifrado los costes de reestructuración de la posible operación (1.450 millones de euros). La ministra ha alertado de que esta fusión implica un "riesgo evidente de cierre de multitudes de oficinas" en toda España, con el riesgo de exclusión financiera que eso conlleva para la población de determinadas zonas.
La alta concentración es una de las consecuencias más evidentes si la operación finalmente llegara a materializarse. En tal caso, tres entidades -Santander, CaixaBank y el nuevo BBVA- concentrarían el 70% del mercado bancario en España. De hecho, éste es uno de los riesgos que se ciernen sobre la hipotética negociación y algunos análisis no descartan que las autoridades de Competencia intervengan en este sentido. Este lunes, la agencia de calificación Moody's apunta en esta dirección: "Además de las cuestiones relacionadas con la gobernanza, las autoridades de competencia podrían plantear objeciones a un acuerdo dada la concentración en regiones españolas como Valencia, cuyo presidente regional ya ha manifestado su oposición", recoge el documento remitido por la firma.
La gobernanza es otra de las razones que provoca recelos en el seno del consejo de Banco Sabadell que debate la respuesta a BBVA. La entidad de origen vasco ofrece tres puestos en el consejo de la nueva entidad, uno de ellos una vicepresidencia pero sin poderes ejecutivos, algo que no acabarían de ver con buenos ojos ni el presidente vallesano, Josep Oliu, ni otros miembos del consejo por la pérdida de influencia que eso supondría.
El otro foco de disenso es el precio. BBVA propone un canje de acciones en el que los accionistas de Sabadell recibirían una prima del 30% sobre el precio de las acciones del banco el pasado 29 de abril, cuando cerraron a 1,7375 euros en el Ibex 35. Sobre este nivel, la oferta de BBVA ascendería a 2,26 euros por acción. La ecuación de canje para llevar a cabo la compra de Sabadell sería de una acción de nueva emisión de BBVA por cada 4,83 acciones de la entidad adquirida.
A una parte del consejo esta oferta le parece insuficiente y el mismo análisis hacen los mercados. Entre los directivos, no les entusiasma que la propuesta sólo incluya un canje de títulos y preferirían también efectivo, y a eso se suma que una parte de la prima se ha esfumado en estos días por el recorrido en la no descartan la idea de que haya una mejora de los términos por parte del comprador.
A su favor, BBVA cuenta con la ausencia de un accionista de referencia en el consejo de Sabadell. Ninguno ostenta más de un 4%: BlackRock cuenta con un 3,621% del capital del banco, mientras que Fintech Europe tiene el 3,105%, Dimensional Fund un 3,01% y el mexicano David Martínez, un 3,495%. Una mejora en el precio podría llegar a convencer a algunos de estos inversores, cuyo perfil busca maximizar las inversiones que hicieron en su día y eso podría decantar la balanza del lado vasco.
Nadie se atreve a descartar ningún escenario, ni siquiera la estrategia hostil si finalmente Sabadell decidiera rechazar la carta original de Carlos Torres. BBVA y el propio Torres se juegan mucho en este movimiento. Es el segundo intento en menos de cuatro años y otro fallo podría tener un coste reputacional y de imagen para el banco.
Además, hay una lectura económica y estratégica. Si bien BBVA tuvo beneficio récord en 2023 y también en el primer trimestre de este año, la mayor parte de su negocio está vinculado a países emergentes, con México y Turquía a la cabeza, cuya inestabilidad abre interrogantes sobre la evolución futura de los resultados. Absorber Sabadell le daría mayor cuota en mercados desarrollados, amén de situarlo como el tercer banco de Europa, sólo por detrás de Santander y BNP Paribas.