¿Se puede potenciar el bronceado con lo que comes?
Para entender bien cómo influye la alimentación en el bronceado, primero hemos de comprender en qué consiste, ya que no es más que una respuesta natural del cuerpo ante la exposición a los rayos ultravioleta (UV), con la única función de protegerlo.
Los rayos UV estimulan los melanocitos, células encargadas de producir melanina, un pigmento que además de dar color a nuestra piel, actúa absorbiendo los rayos UV y protegiendo las capas más profundas. ¿Qué relación hay entre este proceso y la alimentación?
Como dice la famosa cita «somos lo que comemos», la dieta puede influir en la salud de la piel y, en cierta medida, en la forma en la producción de melanina. Veamos de qué manera:
Betacarotenos
Los betacarotenos son pigmentos antioxidantes, precursores de la vitamina A, la cual es esencial para la salud de nuestra piel. Además, se pueden acumular en la piel proporcionando un tono ligeramente anaranjado, no podemos decir que ayuda a ponernos
Las principales fuentes de betacaroteno son: zanahorias, boniato, calabaza, espinacas y kale.

Licopeno
El licopeno es el antioxidante encargado de la tonalidad roja de alimentos como: tomate, sandía, pomelo rosado y papaya.
Son muchos los estudios que han demostrado que puede ayudar a proteger nuestra piel frente al daño solar, por lo que un elevado consumo puede asegurarnos una exposición solar más segura.
Vitamina C
No influye de manera directa en el bronceado, pero su función es imprescindible para la producción de colágeno y la regeneración de la piel, por lo que juega un papel importante en la reparación después del daño solar.
El tomate, pimiento, brócoli o frutas cítricas como la naranja, fresas y kiwi son grandes fuentes de vitamina C.

Ácidos grasos Omega-3
Los omega-3 mantienen la piel flexible y bien hidratada, lo que hace que el color de piel se vea más radiante y se mantenga mejor.
Las principales fuentes son los pescados azules como el salmón, el atún o las sardinas, mariscos, algas, nueces, semillas de lino y de cáñamo.

Aminoácidos y proteínas
La melanina se produce a partir de un aminoácido, la tirosina. Por lo que un consumo adecuado de proteínas es fundamental para su producción.
Hidratación
Como parte de una buena alimentación, nunca podemos dejar de lado el agua. Además, en este caso, la correcta hidratación es crucial para mantener la piel saludable.
Una exposición prolongada al sol, sumada a las altas temperaturas pueden deshidratar nuestra piel, la reseca y la hace más propensa a la descamación, por lo que beber suficiente agua puede ayudarnos a prevenir estos efectos, así como utilizar una crema solar adecuada.
Una piel bien hidratada y sana es capaz de regenerarse más rápido.

Hay que recordar que aunque ciertos alimentos puedan ayudar a mejorar el bronceado y mantener una piel saludable, no son la panacea, ya que independientemente de nuestra alimentación, siempre hemos de utilizar la protección solar adecuada.
La alimentación puede influir en la apariencia de nuestra piel y también puede contribuir a que nuestro bronceado sea más saludable.
Puedes saber más dela nutricionista Elisa Escorihuela a través de su cuenta de Instagram: @eliescorihuela , su labor en el Centro de Nutrición Nutt y en su libro 'Dietoterapia'. Además puedes leer todas las recomendaciones nutricionales que recogen sus artículos en ABC de 'Aula de nutrición'.