Qué debes saber del consumo de alimentos light, por los nutricionistas

Видео по теме

Actualmente, los supermercados están repletos de alimentos light que nos llaman la atención por sus etiquetas en las que nos indican que cuentan con pocas calorías y que nos ayudan a controlar el peso. De este modo, terminamos asociando este tipo de productos a una dieta saludable y a una opción para adelgazar, llenando nuestro carrito de la compra con ellos y consumiéndolos más. Sin embargo, no son lo que parecen.

¿Qué son los productos light?

Para que a un alimento se le considere light debe tener, por ley, un 30% menos de contenido calórico que su homólogo no light. "Para conseguir reducir las calorías, se reduce un poco la cantidad de grasas o azúcares del producto original, nada más", explica la dietista-nutricionista Sara Jiménez Huertas. Eso no significa que sea más saludable. Además, a este tipo de productos se les suelen añadir aditivos, muchas veces no demasiado sanos, para contrarrestar la pérdida de sabor que sufren al quitarle las grasas y los azúcares.

¿Los productos light son buenos?

Cuando hablamos de alimentos saludables nos referimos a las frutas, las verduras, las legumbres, los frutos secos, los cereales integrales, los huevos, los pescados, las carnes... A estos no les hace falta contar con una versión light. En cambio, sí que la tienen los refrescos, los aperitivos, las galletas, los batidos, las salsas, los quesos de untar o las mermeladas. Todos ellos destacan por ser ricos en nutrientes poco interesantes como las grasas saturadas, los azúcares o la sal. Por tanto, hablar de un producto light no es hablar de un alimento bueno.

Que un producto sea bueno no tiene nada que ver con que sea light o no. "Hay que analizar muy bien el alimento que estáis ingiriendo o el producto que estáis comprando y hacer una valoración crítica y global del mismo", aconsejan en el canal de YouTube de las clínicas de nutrición Alimmenta. Para ello, hay que fijarse bien en el etiquetado nutricional y en la composición del producto, sin dejarse llevar por la publicidad o el envoltorio.

¿Los alimentos light no tienen calorías?

Como hemos apuntado, a los alimentos light les quitan el 30% de sus calorías. Eso no quiere decir que no las tengan, sino que llevan una cantidad menor. "Si el producto original era de por sí muy calórico, aunque se elimine el 30%, seguirá siendo poco recomendable su consumo. Así que sé precavida con este falso mito y evita usarlo como excusa para comer demasiados de estos alimentos", aconsejan los expertos del grupo hospitalario Quirónsalud.

¿Puedo basar mi alimentación en productos light?

Para que una dieta sea saludable se debe basar en alimentos reales y mínimamente procesados, pero nunca en productos light. La industria nos ha hecho creer que estos últimos son más sanos y que podemos consumirlos sin problemas, aunque no sea así. "Estamos frente a un ambiente obesogénico muy preocupante y la industria alimentaria se aprovecha de nuestra curiosidad y nuestra voluntad por cambiar nuestra alimentación y nos ofrece productos más llamativos, con reclamos saludables", detalla la nutricionista Sara Jiménez Huertas.

¿Adelgazan los alimentos light?

Otro mito muy extendido es que consumir de manera habitual alimentos light nos va a servir para perder peso. Sin embargo, este tipo de productos no cuenta con efecto adelgazante. "La pérdida de peso y su mantenimiento requiere valorar otros factores, como la actividad física diaria, el ejercicio adicional, el resto de los alimentos que componen la dieta...", recuerdan desde Quirónsalud. No se trata, por tanto, de algo tan sencillo como consumir únicamente productos etiquetados como ligeros.

¿Cuándo los productos light sí pueden ser una buena alternativa?

Pese a que los productos light no sean saludables, sí que pueden ser una buena alternativa para aquellas personas que de forma frecuente y en cantidades generosas coman alimentos de alto contenido calórico, un hábito que obviamente no es nada sano. "Las opciones light suelen presentar menos calorías, grasas o azúcares que las versiones originales, y, por tanto, para todo aquel que busque mejorar su salud o reducir el peso, pueden ser una alternativa a los productos originales más calóricos, pero siempre y cuando se consuman de forma moderada y responsable", explica la nutricionista María Neira. En cualquier caso, como antes indicábamos, siempre es mejor seguir una dieta con alimentos reales y poco procesados.