Dos astronautas de la NASA estrenarán esta madrugada la nueva nave espacial Starliner de Boeing

Por fin ha llegado la hora. Si no hay más contratiempos y la meteorología no lo impide, los astronautas de la NASA Sunita Williams y Barry Wilmore estrenarán esta madrugada Starliner, la flamante nueva nave espacial de EEUU que desde hace más de una década está desarrollando la empresa privada Boeing.

El despegue desde Cabo Cañaveral, a bordo de un cohete Atlas V de la compañía United Launch Alliance (ULA), está previsto para las 22.34 del lunes, hora local en Florida (4.34 horas del martes en la Península).

Sunita Williams y Barry Wilmore protagonizarán el primer vuelo tripulado de este vehículo, bautizado con el nombre de Calypso por parte de Williams, y que la NASA pretende utilizar para llevar a la Estación Espacial Internacional (ISS) a sus astronautas.

El cohete  Atlas V rocket con la nave Starliner, lista para el despegue en Cabo Cañaveral
El cohete Atlas V rocket con la nave Starliner, lista para el despegue en Cabo CañaveralNASA/Joel Kowsky

Si el lanzamiento va según lo previsto, el plan es que Starliner se acomple al módulo Harmony de la ISS el miércoles a las 6.46 horas (en la Península) y que ambos astronautas pasen una semana en la plataforma orbital.

Actualmente las dos naves disponibles para viajar a la ISS son las naves rusas Soyuz y la Crew Dragon, de SpaceX. Hasta julio de 2011, se usaban los transbordadores (shuttle) de la NASA, pero tras su jubilación, la agencia espacial optó por financiar el desarrollo bajo su supervisión de dos naves privadas que actuaran como 'taxis' para la ISS. Las empresas elegidas en 2014 para ello fueron Boeing y SpaceX. La primera recibió una financiación pública de 4.200 millones de dólares mientras que SpaceX obtuvo 2.600 millones.

Para saber más

Aunque también sobrepasó los plazos previstos inicialmente, la empresa aeroespacial de Elon Musk ha sido mucho más rápida que Boeing, pues tras realizar las pertinentes pruebas, puso en marcha el programa de vuelos tripulados de la Crew Dragon en 2020.

Boeing, sin embargo, sólo ha sido capaz de realizar en estos 10 años dos test sin tripulantes de Starliner. En la primera prueba, realizada en octubre de 2019, la nave no logró llegar a la ISS y tuvo que regresar a la Tierra. El segundo test sin tripulación se llevó a cabo en mayo de 2022 y salió bien, dando paso a los preparativos de la primera prueba tripulada. Sin embargo, ésta no pudo llevarse a cabo en julio de 2023 por varios problemas técnicos identificados principalmente en el sistema de paracaídas y en el cableado, pues se descubrió que una cinta utilizada en diferentes partes de la nave era inflamable.