

Matthew Livelsberger, el hombre que alquiló el Cybertruck de Tesla y que hizo explotar frente a un hotel en Las Vegas propiedad de Donald Trump el pasado 1 de enero, utilizó la popular herramienta de inteligencia artificial ChatGPT para preparar el atentado.
Según la policía de Las Vegas en colaboración con el FBI y la división antiterrorista de EEUU, Livelsberger recurrió a la herramienta de OpenAI para preguntar sobre la efectividad de los explosivos, si era legal comprar fuegos artificiales (que detonaron junto al explosivo inicial) en el estado de Arizona y sobre cómo conseguir un arma de fuego en la ciudad de Denver, en el estado norteamericano de Colorado.
"Este es el primer incidente que conozco en suelo estadounidense donde ChatGPT se utiliza para ayudar a un individuo a construir un explosivo. Estamos ante una situación preocupante", explicó el sheriff de la policía metropolitana de Las Vegas, Kevin McMahill.
En total, Livelsberger realizó más de 17 preguntas a la inteligencia artificial de OpenAI. Todas en lenguaje natural y sin tener que forzar las respuestas por parte de ChatGPT.
Los modelos de lenguaje que utilizan estas herramientas pueden programarse para ofuscar algunos temas o tipos de respuestas, aunque a menudo es posible convencerlos de que respondan insistiendo en la pregunta o tratando de "razonar" con ellos la importancia de obtener una respuesta.
La tesis que baraja ahora mismo la policía de la ciudad es que Livelsberger, un soldado de élite con un elevado número de condecoraciones, no buscaba crear una masacre sino quitarse la vida. El vehículo iba cargado de cilindros de gas y de combustible para acampar, y morteros de pirotecnia de alto calibre. Livelsberger murió de un disparo autoinfligido en la cabeza momentos antes de producirse la explosión, que hirió a siete personas.
Livelsberger alquiló el vehículo usando la app Turo, que permite a particulares alquilar sus vehículos a terceras personas, de la misma forma que Airbnb facilita alquilar viviendas o dormitorios. Un día antes, un veterano del ejército estadounidense, Shamsud Din Jabbar, utilizó la misma plataforma para alquilar el vehículo con el que arrolló a 13 personas en una concurrida calle de Nueva Orleans pero, de momento, las autoridades no creen que ambos incidentes estén relacionados.