Trabajo ofrece bonificaciones a las pequeñas empresas obligadas a contratar por la reducción de jornada a 37,5 horas

«Esas bonificaciones tienen que ir dirigidas a aquellos puestos de trabajo, a aquellos contratos de trabajo, que se hagan para completar el tiempo que dejan libre las plantillas cuando la jornada se reduce», señalaba tras la reunión el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, apuntando no obstante, que no es un elemento cerrado y que Trabajo está dispuesto a analizar otras vías y aportaciones de las patronales y sindicatos, así como de la asociaciones de autónomos.

Además, el Gobierno incluyen en el nuevo borrador un plan de acompañamiento al pymes, que el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey ha denominado como 'Pyme 375' que incorpora medidas de asesoramiento y formación para las empresas de menor tamaño, que componen más del 90% del tejido productivo de nuestro país. Según explica Trabajo, enfocado en que estos centros productivos pueda incorporar todo el paquete de la reducción de jornada, que suma la implantación de un registro horario digital y remoto accesible a tiempo real para la Inspección de Trabajo, y la garantía de la desconexión digital.

Si bien explicó gabinete de la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que se trata de una oferta delimitada y que supone un perímetro a la negociación, aseguran estar abiertos a aportaciones sobre singularidades sectoriales. De hecho, mantiene en este último borrador la flexibilización de la distribución irregular de jornada que habían exigido CEOE y Cepyme para sectores específicos con marcados picos de actividad estacional, como es el caso de la hostelería. Que permitiría concentrar en esos momentos un mayor volumen de horas de la jornada contabilizada de forma anual.

Conservar la productividad

La nueva oferta de Trabajo se centra de este modo en una serie de medidas destinadas a amortiguar el severo impacto que tendrá la reducción de jornada, especialmente entre las pequeñas y medianas empresas. Según un reciente informe de la patronal Cepyme -presente en la mesa de negociación- la medida tendría un coste directo sobre las pymes de 12.000 millones de euros sólo por las horas que se dejen de trabajar sin merma salarial. Si se extrapola al impacto sobre la producción y medidas complementarias de adaptación al nuevo horario -contrataciones, horas extra, etc.- el coste podría ascender a 42.000 millones de euros.

Además, este intento de incluir a CEOE en el acuerdo se produce después de que justo antes de verano, ya con un acuerdo casi completo ente Trabajo y los sindicatos UGT y CC.OO., el Ministerio de Economía alzase la voz alineándose en cierta medida con algunos de los planteamientos de los empresarios, que denunciaban un impacto negativo sobre la productividad y la competitividad del tejido productivo español.