'Descarados', una sátira de nuestro tiempo>
'Descarados' es un vodevil donde se une la intriga, incluso cierta atmósfera de thriller, a la crítica social. Aparecen referentes a nuestra actualidad, el CNI, las prácticas policiales, la judicatura y sobre todo el Rey Emérito, pero es en este último donde con más enjundia se muestran los elementos paródicos. Un accidente y un intento de secuestro a las puertas del recinto de la Zarzuela sirven como motor para el desarrollo de una obra presidida, como nuestro propio tiempo, por la paranoia. 'Descarados' es un retablo de nuestras paranoias presentes: está la suplantación de personalidad, el fantasma del terrorismo, la judicatura y su accidentada relación con la policía, la medicina utilizada como coartada y dos mujeres que compiten por un amor.
Y sin embargo la obra no llega a entusiasmarnos y solo aquí y allá el humor y el equívoco, estrategias que utiliza Dario Fo para desentrañar las sombras de nuestra sociedad, se muestran verdaderamente convincentes. La interpretación de Juan Gea le da altura a un montaje que transcurre pero no hipnotiza, que no acaba de atrapar ni de conmocionar al público. 'Descarados' no deja de mostrarnos ese talento para lo hilarante y lo paródico que son marca de la casa de L´Om Imprebís y levanta un oportuno homenaje a Dario Fo, es digna de aplauso esa visión que hace de una sociedad a la que en muchos aspectos no se puede tomar en serio porque la tragedia de ella es una forma de humor.