La 'rentrée' política de Dominic Cummings
Dominic Cummings, el artífice de la campaña del Brexit y de la victoria electoral de Boris Johnson, planea la vuelta a la política británica con un nuevo partido para las próximas elecciones y está, de hecho, orquestando las maniobras de Elon Musk para desestabilizar al Gobierno de laborista de Keir Starmer, según The Mail On Sunday.
El propio Cummings, especialmente activo en la plataforma Substack, se ha referido a su hipotética formación como StartUp Party, aunque ha advertido que la denominación es solamente "una manera de marcar posiciones, antes de entrar en horribles discusiones sobre el nombre, si hacemos que esto sea real".
Sus primeras maniobras se detectaron en mayo de 2024, tras la convocatoria de elecciones anticipadas por parte de Rishi Sunak y ante el temor de un batacazo electoral del Partido Conservador. En las últimas semanas, y al cabo de seis meses de gobierno de Keir Starmer, su actividad se ha intensificado en aparente colaboración y coordinación con Elon Musk.
Cummings y Musk estarían en contacto directo a través de un grupo de WhatsApp creado por el empresario norteamericano. Fuentes del Partido Laborista expresaron a The Mail On Sunday su sospecha de que Cummings podría incluso estar escribiéndole a Musk sus invectivas contra Starmer en X, por el horario en el que son difundidas y por el frecuente uso de terminología política británica como "two-tier Keir" ("Keir de dos velocidades").
El ex asesor de Boris Johnson, de 53 años, arrastra la fama de "libertario y disruptivo". Su obsesión fue siempre emprender una cura de adelgazamiento del sector público, en consonancia con la futura misión de Elon Musk como director del Departamento de Eficiencia del Gobierno cuando Donald Trump tome posesión como presidente de Estados Unidos el próximo 20 de enero.
"Gobierno de alto rendimiento y tecnologías cognitivas" fue precisamente el título del último informe redactado por Cummings como asesor de Downing Street, días después de ser despedido por las fricciones con la esposa del ex premier, Carrie Johnson, y por el revuelo causado por violar las restricciones del Covid con su famoso viaje a Durham, su ciudad natal.
La reducción a toda costa del sector público, la salida de la Convención Europea de Derechos Humanos y la cruzada anti-woke (otro de los puntos en común con Musk) son algunas de las líneas electorales con las que Cummings pretender empaquetar el StartUp Party, con el objetivo de "romper el statu quo de Westminster" en competencia directa con Reform UK de Nigel Farage.
El propio Musk cuestionó recientemente el liderazgo de Farage, que posó orgullosamente con él hace apenas un mes en la residencia de Mar-a-Lago. El motivo de la fricción fue el apoyo de Musk a Tommy Robinson, ex líder de la Liga de Defensa Inglesa y el rostro más emblemático de la ultraderecha británica, condenado a 18 meses de cárcel por desacato judicial.
"No va a haber fricciones a largo plazo y estamos de acuerdo en que no va haber guerra entre nosotros", ha declarado Farage, que asegura haber hecho las paces con Musk. Su intervención ha servido, sin embargo, para abrir una brecha en Reform UK, con la dimisión en cadena de hasta diez concejales condenando "el liderazgo autocrático de Farage".
Apoyándose en Cummings o en Farage, y con una cifra estimada en 100 millones de libras en la chequera, Musk parece en cualquier caso dispuesto a "liberar al Reino Unido de su Gobierno tiránico" y a desestabilizar en todo lo posible a Keir Starmer, a quien ha llegado a comparar con Stalin en uno de sus mensajes.