Historia de una guardería infantil: «Si nos va bien, es que los dos padres trabajan»

Cuando una guardería tiene clientela significa que «los dos padres de todos esos niños tienen un trabajo» y, por ello, la necesidad de recurrir al servicio que les ofrecen estos centros de enseñanza. Pero también, recuerda De la Viuda, una guardería con vida es el indicador de que la natalidad resiste en el barrio. «La experiencia me ha enseñado que nuestra sociedad se empeña en sobreproteger en exceso a los más pequeños, en aislarles del mundo en una burbuja para evitar que les pase algo malo. Los bebés que desde el inicio de su vida están en contacto con otros bebés aprenden a relacionarse mejor y, años más tarde, cuando empieza el colegio, sufren mucho menos la separación de sus familias», opina esta pedagoga a ABC.

Laura de la Viuda es la directora del centro infantil Los Ángeles, sí. Pero también hace de administrativa, de portera o de telefonista. En parte, ahí está la clave de su manual de resistencia en una sociedad de guarderías menguantes. Exprime lo mejor que puede los recursos de los que dispone en una guardería que emplea a nueve educadoras y un equipo de otras tres profesionales que se encargan de cuestiones como el comedor o el mantenimiento de las instalaciones. «Por convenio, el dinero que recibimos de la comunidad es ajustado y en los últimos tiempos tenemos que ingeniárnoslas para ser sostenibles. Además hay muchas familias que están becadas», apunta De la Viuda.

Hace tan sólo unos días, las principales organizaciones patronales y sindicales del sector de la privada firmaron una declaración en defensa del primer ciclo de Educación Infantil (0-3 años), reclamando medidas urgentes al Ministerio de Educación para garantizar su sostenibilidad, universalización y gratuidad.

Un mercado que da empleo a 50.000 profesionales

El mercado está compuesto mayoritariamente por autónomos, por pymes. Da empleo a más de 50.000 profesionales –en su mayoría mujeres jóvenes y cualificadas– y atiende a más de 200.000 familias. Sin embargo, lamentan desde el sector, se enfrentan a graves dificultades estructurales debido a la baja natalidad y la insuficiente financiación pública, lo que ha llevado a la desaparición del 25% de los centros en los últimos cinco años. Una de cada cuatro guardería en España ha tenido que cerrar en un lustro. Además, alertaron al equipo de Pilar Alegría de la existencia de establecimientos irregulares (como ludotecas), que operan sin cumplir la normativa educativa.

Piden al ministerio una financiación justa y estable para alcanzar la gratuidad y universalidad del ciclo 0-3, garantizando la viabilidad de los centros y la mejora de las condiciones laborales. Asimismo, solicitan la creación de una mesa sectorial de Educación Infantil que permita abordar de forma específica los retos del sector.

Buenos datos de escolarización temprana

El dato del cierre del 25% de las guarderías llama especialmente la atención si se tiene en cuenta que España sobresale por encima del resto de países en escolarización temprana. Según el último informe de la OCDE, el 30% de los niños menores de 2 años van al colegio en nuestro país, un porcentaje muy por encima del 18% que lo hacen de media. Una vez cumplidos los 2 años, esta proporción asciende al 64%, mientras que en el resto de países el porcentaje se sitúa en el 42%.

Desde la escuela infantil Los Ángeles señalan otro factor que está poniendo cada vez más difícil su supervivencia: en los colegios públicos y concertados cada vez sobra más espacio por la falta de alumnos y hay aulas que se van quedando vacías, inservibles. Ante esta realidad, cada vez más centros deciden abrir aulas para niños de 2 a 3 años: «Esto también nos está haciendo daño», dice Laura de la Viuda.

En cualquier caso, considera que siempre será mejor que los niños vayan a un colegio y no que se queden con una 'mamá de día' que muchas veces no tiene la formación adecuada: «En las guarderías no sólo 'guardamos' a los niños, sino que les educamos. Les ayudamos empezar a deducir, a descubrir la lógica. A preparar el terreno para empezar a leer y a escribir», reivindica.

La escuela infantil de Los Ángeles abrió sus puertas hace más de 60 años, cuando las mujeres en España se iban incorporando al mercado laboral. Nacieron como lo que antes se denominaban 'guarderías laborales', que solían estar vinculadas a la parroquia más cercana. En la actualidad, tienen matriculados a un total de 96 niños: 8 de 0-1 año, 28 de 1-2 años y 60 de 2-3 años. «Resistimos, pero comparando los números que tuvimos el año pasado, hemos seguido bajando», alerta. A Laura le interrumpen un par de compañeras mientras charla con ABC. «Dame un segundo. Pero si necesitas un S.O.S, dímelo», les contesta. Ese es el día a día de las guarderías que logran mantenerse abiertas.