Francia lanza un proyecto piloto para ampliar las pruebas de detección de la sumisión química

Este lunes la Fiscalía ha pedido 20 años de cárcel contra Pelicot. Esta es la máxima pena que contempla el Código Penal francés para estos delitos.

El juicio, que se ha extendido durante más de dos meses, está llamado a marcar «un antes y un después» en la conciencia social, en palabras del primer ministro galo, Michel Barnier, que ha aprovechado el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer para lanzar la nueva iniciativa.

Con esta acción, el Ejecutivo quiere «experimentar» con un programa nuevo para que las pruebas de detección de la sumisión química sean «accesibles y reembolsables». Este proyecto arrancará en varios departamentos, con vistas a «mejorar la atención a posibles víctimas», ha explicado Barnier, según recoge la cadena BFM TV.

El Colegio de Médicos de Francia ya había solicitado la generalización de estas pruebas, que pueden alcanzar los mil euros. Actualmente, la Seguridad Social sólo se hace cargo de los gastos si hay una denuncia de por medio, por lo que los expertos creen el hecho de que el Estado asuma con mayor facilidad el coste puede hacer que las potenciales víctimas actúen y lo hagan antes.