Un tifón "muy fuerte" amenaza Tokio

Tokio y otras regiones centrales de la costa nipona del Pacífico están este viernes en alerta meteorológica por el avance del poderoso tifón Ampil. Cientos de vuelos y conexiones ferroviarias fueron cancelados y miles de hogares se quedaron sin electricidad en Japón ante el avance de este tifón "muy fuerte".

Ampil, el séptimo tifón de la temporada en el Pacífico, se encontraba este viernes a las 16:00 horas (09:00 horario España) a unos 170 km al sur de Tokio y se dirigía hacia el norte/noreste con ráfagas de viento de hasta 216 km/h, según la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).

La previsión es que el ojo del tifón se mantenga dentro del mar mientras el sistema tormentoso remonta la costa del área metropolitana de Tokio, donde viven casi 40 millones de personas, y luego se desvíe hacia el este para adentrarse nuevamente en el océano Pacífico.

La agencia japonesa catalogó la tormenta como "muy fuerte", un punto debajo de la categoría máxima de "tifón violento". La población "debe estar en máxima alerta por las tormentas, fuertes olas, desprendimientos de tierra e inundaciones", dijo la JMA.

Tres heridos leves

A medida que el tifón avanza, se están registrando algunos daños en Tokio y Chiba, y se ha informado de al menos tres heridos leves. Unos 2.000 hogares en las prefecturas vecinas de Tokio se encontraban sin electricidad este viernes por la tarde, según el operador público de energía.

Las cadenas de televisión mostraban imágenes de árboles tumbados, carreteras inundadas y grandes olas en las costas.

La tormenta también provocó la cancelación de 335 vuelos de la aerolínea ANA y de 361 de su rival Japan Airlines, con casi 130.000 pasajeros afectados.

La circulación de trenes de alta velocidad también se suspendió en gran parte de la red, incluido el frecuentado tramo entre Tokio y la metrópolis de Nagoya, y Disney anunció el cierre de sus parques temáticos en la capital.

El tifón coincide con un periodo de vacaciones en Japón en el que millones de personas vuelven a sus casas y llega días después de que la tormenta tropical María dejara lluvias récord en el norte del país.