PSOE y Vox se culpan de «llevar el clima de crispación a las calles»>

En consonancia del discurso de las filas socialistas desde el ámbito provincial al nacional –por ejemplo, por parte de la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero–, Tudanca ha disparado directamente contra Vox y, de paso, metió en el mismo saco al Partido Popular. Según el dirigente autonómico de la formación de la rosa, lo vivido en Ponferrada se enmarca en el «discurso del odio, el enfrentamiento, los insultos, amenazas y ataques a las casas del Pueblo» que el PSOE «sufre desde hace meses» y que «han sido alentadas por Vox y la extrema derecha y consentidas por el PP, que les ha metido en las instituciones».

Si al ponerse ante el espejo de la responsabilidad, para un Tudanca sin un ápice de autocrítica el reflejo que arroja es señalar a Vox e incluir en el mismo saco al PP, para García-Gallardo el responsable es el PSOE. «Yo lo que creo es que la violencia política debe ser apartada y condenada», ha apuntado el vicepresidente, quien a renglón seguido ha defendido que desde Vox «lo hacemos reiteradamente». Pero, ha añadido, «vemos que el Partido Socialista condena, como nosotros condenamos, esta agresión de la que desde luego no nos sentimos responsables, pero luego olvida condenar todas las agresiones que sufren nuestros militantes, afiliados y simpatizantes en cada campaña electoral» y que está «alimentado por el relato falso y sectario de los medios de comunicación de que Vox es un partido radical y extremista».

«Yo creo que hay mucho que reflexionar al respecto, pero desde luego nosotros no admitimos ni una sola lección del PSOE en esta materia», ha subrayado García-Gallardo, quien ha recriminado que los socialistas están «aliados» con los separatistas y «con la ETA política que vemos que es Bildu» y sus 140 años están «trufados de todo tipo de crímenes y delitos». Así que, ha continuado, «no están en condiciones de dar lecciones a nadie, y mucho menos a Vox, que nunca ha promocionado, nunca ha incentivado ningún tipo de violencia contra el resto de nuestros compatriotas».

Así que tras reiterar verbalmente la «condena» que ya había expresado vía X a lo sucedido a Ramón, el vicepresidente de la Junta ha incidido en que «nosotros no vamos a aceptar en ningún momento la superioridad moral de la izquierda que nos trata de decir que nosotros somos culpables de un clima de odio y de crispación que no es nuevo». Un estado del que ha responsabilizado directamente al PSOE no sólo ahora, sino «durante distintas etapas del siglo XX».

Sin embargo, para Tudanca esta agresión que, ha afirmado, «lamentablemente no nos sorprende», es «el último paso en una escalada de violencia» de la que ha culpado a los dos socios de Gobierno en Castilla y León, en referencia a PP y Vox. «Lo advertimos: meter a la extrema derecha en las instituciones traería la ruptura de la convivencia, el odio, la destrucción de una manera de hacer política en la que nosotros creemos profundamente, en la propia esencia de la democracia. No se puede ser tibios y haber equidistancia», ha sentenciado Tudanca en declaraciones recogidas por Ical.

La «responsabilidad es de quien alienta, nunca de las víctimas o de quienes sufren la violencia», ha sostenido Tudanca, quien ha confiado en que «la excusa no sea que el dirigente es provocador o tiene un lenguaje más agresivo» dada la moderación de Olegario Ramón. «Esto lo tiene que parar Vox, que lo alienta, pero también el PP, que es responsable y cómplice de que esto suceda», ha incidido.