Retraso en la entrega del submarino S-82 a la Armada, que no lo tendrá en 2024>
La historia del programa S-80 está llena de luces y sombras. Todo parecía encaminado el pasado mes de noviembre cuando Navantia entregó a la Armada el primero de los submarinos, el S-81 Isaac Peral, tras dos décadas de retrasos e incertidumbres que incluyeron un sobrecoste millonario por problemas en su diseño.
Desde entonces, el buque ha estado a prueba en la Armada sin sufrir ninguna avería reseñable que le haya obligado a regresar a puerto. Tiene previsto continuar con el calendario de pruebas durante abril y mayo para entrar en servicio a lo largo del año 2025.
Sin embargo, el segundo de los sumergibles es el que ahora acumula retrasos en su construcción y no podrá ser entregado a la Armada antes de que finalice 2024, como ha desvelado este lunes la ministra de Defensa, Margarita Robles, en una visita al arsenal de Cartagena.
Allí, Robles no ha ocultado su preocupación por el retraso y se ha comprometido a reconducir la situación «porque es un programa esencial para España, y para Cartagena», para lo que ha anunciado que pedirá a Navantia un esfuerzo especial para que el submarino avance más deprisa.
El ministerio de Defensa reconoce que el programa S-80 supone el mayor reto industrial y tecnológico afrontado por la industria de defensa nacional, ya que es un submarino diseñado con un sistema para operar autónomamente en un entorno muy hostil durante largos periodos de tiempo.
Se compone de cuatro unidades bautizadas con nombres de pioneros de la navegación submarina: Isaac Peral, Narciso Monturol, Cosme García y Mateo García de los Reyes.