Sánchez reafirma los beneficios de una migración "segura, ordenada y regular" frente a las críticas de Feijóo
Los contenedores, muchos de ellos bañados ya en óxido esperan junto a buques de mercancías, en el puerto de Banjul, la capital de Gambia. El agua, de tono marrón, está tranquila. En calma. Un agua que más allá del horizonte es muchas veces una trampa mortal para muchos de quienes intentar llegar a Europa, a las costas españolas.
Hasta aquí se ha desplazado Pedro Sánchez en el marcó de la gira por África que le está llevando a visitar Mauritania, Gambia y Senegal. Rodeado de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que luchan a pie de mar contra la migración irregular. El presidente del Gobierno sella este miércoles con su homólogo gambiano un acuerdo para impulsar la migración circular -formar a ciudadanos en origen para que viajen a España a trabajar durante un periodo de tiempo concreto para cubrir la demanda de empresas españolas y luego regresen-.
La visita al puerto de Banjul y la firma de este acuerdo -que ya se firmó el martes con Mauritania- han servido al jefe del Ejecutivo para reafirmar su apuesta por una "migración segura, ordenada y regular que beneficie tanto a nuestros países como a nuestros ciudadanos".
Un mensaje que es que el está trasladado Sánchez a estos países del África Occidental y que persigue el propósito de que toda vez que la migración es un fenómeno complejo, que al menos en la mayor medida posible se puede canalizar de manera legal. Así, Mauritania y Gambia se suman a países como Senegal, Colombia, Honduras, Argentina, Ecuador o Uruguay.
Las palabras del presidente del Gobierno desde Gambia se producen sólo unas horas después de que Alberto Núñez Feijóo tachara a Sánchez de "irresponsable" por "alentar el efecto llamada" a la migración irregular por exponer España como "destino".
Sánchez ha aprovechado su visita para agradecer la labor que hacen los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil desplazados a estos países, y que trabajan de manera conjunta con las autoridades locales. "Juntos tenemos un objetivo común: salvar vidas en el mar y detener a las mafias que explotan a personas que tienen un legítimo deseo de prosperar".
La política del Gobierno para tratar de frenar la migración irregular es cooperar con los países de origen y tránsito. De ahí los proyectos para formar a personas en origen, los proyectos de formaciones a agentes locales o la presencia de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
"El fenómeno migratorio no entiende de fronteras. Por esa razón, España apuesta por una política migratoria en la que participen todos los actores implicados y fomente la colaboración con los países de origen, tránsito y destino. Solo así podremos hacer frente a un reto transnacional como es la migración', es la reflexión que ha traslado Sánchez en una comparecencia sin preguntas.
En Gambia hay 10 operativos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. En concreto hay 4 miembros de la Policía Nacional, como integrantes junto a Alemania de un equipo POC (Partenariado Operativo Conjunto) de la UE y que España lidera desde 2021.
Además, hay seis integrantes de la Guardia Civil, que desarrollan su trabajo en el Puerto de Banjul y que operan una embarcación semirrígida y un vehículo todoterreno.
Su misión está enfocada a una lucha integral contra el tráfico de migrantes y la trata de seres humanos. Según datos facilitados en junio con motivo de la visita a Gambia de José Manuel Albares, en lo que va de 2024 está labor de vigilancia ha frustrado al menos 15 intentos de salidas de migrantes hacia el mar.
"En materia de migración, el trabajo de la Policía y la Guardia Civil es tan importante dentro como fuera de nuestras fronteras. Es de justicia decirlo: sois imprescindibles.
"Soy consciente de que los últimos meses están siendo especialmente complicados, con un relevante repunte migratorio en las salidas desde Gambia", ha agradecido Sánchez.