

A sus 65 años, el astronauta Miguel López-Alegría vuelve a enfundarse este miércoles el traje de astronauta para regresar al espacio. Lo hará como comandante de la tercera misión privada de la empresa Axiom Space, que le fichó para liderar a las tripulaciones de astronautas que no forman parte de ninguna agencia espacial, en un programa comercial que pretende que más personas viajen al espacio.
Ahora estará al frente de la misión Ax-3, que Axiom ha presentado como la primera misión en la que la tripulación es completamente europea. Junto a López-Alegría viajan el militar italiano Walter Villadei, como piloto, y como especialistas de la misión el turco Alper Gezeravc (primer astronauta de ese país) y el sueco Marcus Wandt, astronauta reservista de la Agencia Espacial Europea (ESA).
El cohete (Falcon 9) y la nave espacial (Dragon) utilizados en esta misión son también de una empresa privada, pues han sido fabricadas por SpaceX, de Elon Musk, y son los vehículos utilizados desde hace años para llevar a la Estación Espacial Internacional (ISS) a los astronautas de la NASA, la ESA y Roscosmos. Si la meteorología o algún fallo técnico de última no lo impide, despegarán este miércoles a las 23.11 horas (hora peninsular española) desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en Florida, para pasar dos semanas en la ISS.
Como detalló López-Alegría durante una rueda de prensa el pasado 11 de enero, las investigaciones que van a hacer durante estas dos semanas incluirán aspectos los efectos de la falta de gravedad en el cuerpo humano o los mecanismos detrás de ciertas enfermedades como el cáncer, así como investigaciones con células madre.
Desde que se jubiló de la NASA (en cuyas misiones llevaba la bandera estadounidense), Miguel López-Alegría (nacido en Madrid, de padres españoles y nacionalidad estadounidense) puede llevar también la bandera española al espacio. Ya lo hizo, por primera vez, en abril de 2022, durante la primera misión privada de Axiom que comandó, y en la que estuvo acompañado por Larry Connor, un empresario del sector inmobiliario y tecnológico; el israelí Eytan Stibbe, ex piloto de las Fuerzas Armadas, inversor y filántropo, y el canadiense Mark Pathy, empresario, inversor y filántropo. Pasaron 17 días en el espacio, siete más de lo previsto inicialmente, debido a varios retrasos en el vuelo de regreso debido a la climatología.
La segunda misión privada de Axiom, Ax-2, fue comandada en 2023 por la también muy veterana ex astronauta de la NASA Peggy Whitson, que tiene 63 años. López-Alegría se ocupará de esta tercera misión, durante la cual realizarán distintos experimentos y estudios vinculados con la investigación de la microgravedad y demostraciones tecnologías.
Aunque Axiom considera a los tripulantes de sus misiones astronautas, parte de la comunidad del sector espacial los ve más como turistas espaciales que pagan por vivir esa experiencia en el espacio, ya sea a nivel individual o a través de diversas organizaciones o gobiernos.
Así, el sueco Marcus Wandt fue elegido en noviembre de 2022 astronauta reservista de la misma promoción de la ESA en la que fueron seleccionados los españoles Pablo Álvarez (como astronauta titular del cuerpo de la ESA) y Sara Álvarez, como astronauta reservista, al igual que Wandt. Pero el Gobierno sueco no ha querido esperar a que surja en el futuro una oportunidad en la ESA para volar y ha comprado uno de los billetes de la misión Axiom para Wandt, abonando una cantidad que no ha sido revelada.
El próximo mes de abril, Pablo Álvarez y el resto de los nuevos astronautas del cuerpo titular de la ESA se graduarán, con lo que la asignación de su primera misión estará más cerca. Pero los reservistas como Sara Álvarez tendrán que esperar más para tener una oportunidad de volar en el marco de una misión de la agencia europea.
López-Alegría es uno de los astronautas más veteranos a nivel internacional, y durante su carrera en la NASA batió diversos récords. Forma parte del reducidísmo grupo de astronautas y cosmonautas que ha hecho 10 caminatas espaciales.