Trump exige la dimisión inmediata de Jerome Powell, jefe de la Reserva Federal estadounidense
«¡¡¡'Demasiado Lento' (refiriéndose a Powell) debería dimitir de inmediato!!!», ha afirmado el inquilino de la Casa Blanca a través de TruthSocial, adjuntando un enlace a un artículo que recogía la petición del director de la Agencia Federal de Financiación de la Vivienda (FHFA), Bill Pulte, para que el Congreso abra una investigación sobre Powell.
Previamente, Pulte había difundido a través de la red social X su petición al Congreso para que investigue el sesgo político del presidente de la Reserva Federal, alegando que el reciente testimonio del banquero central ante el Senado fue «engañoso», lo cual justificaría su destitución.
A pesar de que, tal y como informa CNN, algunos colegas de Powell, como la vicepresidenta de supervisión de la Fed, Michelle Bowman, y el gobernador de la Fed, Christopher Waller, habían declarado en ocasiones que el banco central estadounidense podría considerar un recorte de tipos, ninguno de ellos habia sido nunca tan tajante como Trump, exigiendo recortes masivos.
El presidente de EEUU ha criticado con dureza a Jerome Powell y su labor al frente de la Fed ya en numerosas ocasiones, incluso llegando al insulto personal, al calificarle de «tonto» o «imbécil», ante la postura del banco central estadounidense de no seguir bajando los tipos de interés a la espera de observar los efectos de los aranceles anunciados por Trump.
De hecho, Powell declaró en el foro internacional del Banco Central Europeo (BCE) en Sintra, Portugal, que «probablemente habría bajado los tipos de interés si no fuera por las políticas de Trump». Respecto a la cuestión de los periodistas acerca de este supuesto, Powell fue tajante: «Creo que es correcto».
Powell se mostró prudente, declarando permanecer a la espera, al igual que la mayoría de funcionarios de la Fed, para ver como se desarrollaban en el futuro las políticas de Trump, a la hora de tomar la decisión acerca de la bajada de tipos, en la que influyen coyunturas como la inflación o la situación del empleo, que en marzo, abril y mayo se mantuvo en un 4,2% de desempleados.
Powell cuenta también con el apoyo de su homóloga europea, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, que ha defendido públicamente su «enfoque apolítico». Lagarde declaró que Jerome Powell personifica, en su opinión «el estándar de un banquero valiente». Lo cierto es que, a pesar de las numerosas diatribas de Trump contra su labor, Powell se ha mantenido imperturbable.
Al ser preguntado acerca de su visión de estos ataques, y si estos hacen más difícil el trabajo de los funcionarios de la Fed, el máximo dirigente de la Reserva Federal evitó entrar en materia, alegando estar «muy concentrado en su trabajo». Powell, cuyo mandato como presidente de la Fed expira en mayo de 2026, señaló directamente esta semana a los aranceles anunciados por el inquilino de la Casa Blanca como la causa que impidió a la Fed recortar los tipos de interés.
«Intentamos lograr estabilidad macroeconómica, estabilidad financiera y estabilidad económica para el beneficio de todos», declaró Powell en Sintra. «Si queremos tener éxito, debemos hacerlo de forma completamente apolítica, lo que significa no tomar partido. No enfrentamos a un bando con el otro. Nos mantenemos al margen de asuntos que no son de nuestra competencia».