Aumentan los morosos con la Generalitat y el monto hasta los 83 millones de euros>

Los 50 deudores de 2023 tienen cuentas pendientes con la Generalitat debido a sus deudas y sanciones tributarias referidas a los tributos propios autonómicos o cedidos por el Gobierno, todos gestionados por la ATC. Según ha informado la Consejería, los 83,8 millones de euros que deberían estar en las arcas públicas tienen que ver con los impuestos de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, sucesiones y donaciones, y patrimonio, la tasa sobre el juego y liquidaciones procedentes de la Agencia Catalana del Agua (ACA) vinculadas al canon del agua.

La cifra concreta de la deuda acumulada por los 50 deudores es de 83.814.994,69 euros y la lista con los nombres, sus NIF y la deuda particular se puede consultar en la web de la Consejería. Para aparecer en esta lista, los afectados deben cumplir, al menos, la condición de estar pendientes de pago con la ATC de más de 600.000 euros, una cantidad que se rebajó en 2021 pues hasta entonces el listón era de una deuda de más de un millón de euros. Además, según la nueva legislación en el listado también aparecen las personas declaradas responsables solidarias del pago de la deuda con la administración autonómica.

Un plan poco efectivo

Según la Consejería, en manos de Natàlia Mas (ERC), en funciones desde el 12 de mayo, este tipo de iniciativas, como la publicación anual de listas de personas con deudas o sanciones tributarias pendientes de pago, forman parte de las medidas incluidas en el plan para prevenir y reducir el fraude fiscal y, también, fomentar las buenas prácticas tributarias, especificado para el periodo 2023-2026. Su objetivo: «Promover la conciencia cívica y fomentar el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales». Sin embargo, el aumento del número de morosos y la deuda global respecto al año 2022 no parece que el plan cumpla con su finalidad.

En relación a las personas o empresas con deudas mayores, destaca Playbadalona, con 9,3 millones de euros a deber a la ATC; por delante de Rec Madral Companyia d'Aigües, con 7,95 millones de euros de deudas; Riera de Cabanyes Companyia d'Aigües, con 7,4 millones de euros; Ana Maria Borrell Marin, con una deuda de 3,3 millones de euros; Moramar, con 3,3 millones de euros; y Montserrat Unanue Navarro, con 3,2 millones de euros a deber a la Generalitat. Estos seis morosos superan el 40% de la deuda total.