Más violento y polarizado: el México que deja López Obrador a su sucesora
Sheinbaum o Gálvez asumirán un país fuertemente militarizado tras las elecciones que se celebran este domingo
Supuestamente desde la noche del sábado regía una ley seca que busca fomentar la reflexión y la concurrencia a votar, sin embargo, en diversos bares y restaurantes se sirvieron bebidas alcohólicas, incluso sobre la Avenida Paseo de la Reforma a pocos metros del búnker donde Sheinbaum esperaba los resultados.
En un país donde el voto no es obligatorio, el récord de participación del padrón fue en 1994, donde el 77% de los habilitados concurrieron a votar. En la elección presidencial del 2018 el abstencionismo fue del 36%.
En las primeras horas del domingo en la Ciudad de México se ha observdo buena afluencia de votantes. En todo el país se han dispuesto más de 115.000 centros de votación.
La Ciudad de México presentó una elección mucho más disputada que la nacional, donde las encuestas le daban de antemano una marcada ventaja a Sheinbaum.
En la colonia Del Valle, zona de clase media y residencial de la capital, las personas se formaron desde media hora antes de que abrieran las casillas, a las ocho de la mañana. «Hay gente que se queja y se queja y no vota ni hace nada, yo he venido temprano y a lo largo de la mañana llevaré a votar a mi madre y a otros miembros de mi familia», dice a ABC César Jiménez, residente de la Del Valle y defensor del candidato del Frente Amplio opositor, Santiago Taboada.
En la colonia Roma, zona de esparcimiento nocturno y variada oferta gastronómica, Alma Gaona señaló a esta redacción que apoyará con su voto al oficialista Movimiento de Regeneración Nacional: «la Ciudad de México siempre ha sido de izquierdas y esa tradición de respaldos a los que menos tienen volverá a imponerse».
No se detectaron desmanes o trifulcas en los centros de votación. «El país está tranquilo, la gente puede salir a votar de manera libre, tranquila, en paz, así que estamos muy contentos la verdad«, expresó la secretaria de Gobernación Luis María Alcalde, en las primeras horas de jornada electoral. ¿Nada de focos rojos?, se le preguntó. »Por ahora nada de focos rojos, al contrario, una jornada tranquila, un país tranquilo y la gente puede estar segura de que puede salir y votar en libertad«, respondió.
Sheinbaum emitió su voto temprano al sur de la Ciudad de México. «Vamos a ganar, ahora regreso a casa a desayunar y ya luego a trabajar, estoy contenta y vamos para adelante», expresó.
Gálvez voto también en la Ciudad de México y llegó a la casilla a pie y acompañada por su familia. «A los que van a cuidar el voto de los partidos también, que aguanten, va a ser una jornada dura y difícil, reñida, hay una gran participación, lo dije desde un principio», expresó.