El Gobierno culpa únicamente a los Mossos de la fuga de Puigdemont y exculpa a Marlaska
El regreso fugaz del líder independentista, que llegó caminando a pie al escenario de su recibimiento, dio su discurso y huyó del lugar con la ayuda de su hombre de confianza, Gonzalo Boye, dejó en evidencia y sacó a la luz claras fallas en el dispositivo desplegado desde el viernes en el entorno del Parlament de Cataluña para detener el prófugo, que había anunciado su intención de asistir al debate de investidura de Illa. Cabe recordar que sobre Puigdemont pesa aún una orden de detención nacional al rechazar el Tribunal Supremo aplicar la amnistía al delito de malversación.
Precisamente, el magistrado que instruye en el Supremo la causa por el 'procés', Pablo Llarena, ha pedido este viernes explicaciones al Ministerio del Interior y a los Mossos d'Esquadra sobre el «fracaso» del dispositivo policial desplegado en Cataluña. En concreto, el magistrado quiere saber «cuál era el operativo aprobado y dispuesto para su detención» y «los elementos que determinaron su fracaso desde un aspecto técnico policial».
Las providencias del juez Llarena se hicieron públicas momentos de que el ministro Bolaños, en París para asistir a los Juegos Olímpicos, atendiera a los medios de comunicación desde la Residencia de la Embajada de España. El titular de la cartera de Justicia ha sido el primer miembro del Gobierno en reaccionar, un día después, al último 'truco de escapismo' de Puidemont, que regresó, habló y se fugó en apenas 15 minutos.
Ayer, ningún ministro, ni siquiera Sánchez, que se había comprometido en noviembre de 2019 a «traerlo de vuelta a España» para que «rinda cuentas ante la Justicia española», se pronunció sobre la jugada del político fugado, bien sea para condenar su actuación o para responsabilizarlo del intento de Junts por paralizar la investidura de Illa. Solo el titular de Transportes, Óscar Puente, amagó con pronunciarse, aunque lo hizo para responder a las palabras de Núñez Feijóo. «Tápate un poco, Alberto», dijo.
«Corría a cargo de los Mossos»
En sus declaraciones a los periodistas, Bolaños ha descargado toda responsabilidad del Gobierno en la llamada 'Operación Jaula'. «Todo el operativo policial que debía garantizar que el pleno de investidura en el Parlament se pudiera desarrollar con normalidad y, también, todo el operativo que debía garantizar que se cumpliera el mandamiento del Tribunal Supremo y aplicar la orden de detención sobre sobre el señor Puigdemont corría a cargo de los Mossos», ha aclarado el ministro, que se ha remitido a los a la rueda de prensa que da este viernes el conseller de Interior saliente, Joan Ignasi Elena, para explicar este operativo. «Son la policía competente».