En términos ajustados, la caída es del 0,4% y vuelve a poner a Alemania, que no logra superar la ligera estanflación, al borde del precipicio. Las contribuciones positivas provinieron de la formación bruta de capital fijo, pero el mercado exterior se redujo. Las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 0,8% y las importaciones un 1,3%.
«Sólo se espera una ligera recuperación después del cambio de año», según Destatis, que también apunta problemas en el mercado laboral, en el que la productividad global (PIB ajustado en función de los precios por hora trabajada por las personas ocupadas) cayó un 0,8% respecto al mismo trimestre del año anterior. La productividad laboral por persona ocupada cayó un 1,6% en datos interanuales.
Estos datos llegan en medio de una crisis presupuestaria sin precedentes, que han obligado al gobierno a decretar con carácter retroactivo una dudosa situación de emergencia que permitirá suspender de nuevo el freno a la deuda que figura en la Ley Fundamental alemana.
La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, está a Alemania que, «para garantizar el crecimiento, debe invertir en sus infraestructuras, en la reestructuración ecológica de su economía y en las capacidades de su población«.
En una entrevista publicada por «Handelsblatt», Georgieva recuerda que «no estamos hablando de inversiones triviales, sobre todo porque el siguiente paso es la adaptación económica a la inteligencia artificial«, y pide medidas más duras contra el déficit y la deuda.