La estación internacional de Canfranc: la historia, el hotel y el lujo del paso que atraviesa los Pirineos

La estación internacional de Canfranc es un icono de la historia del ferrocarril en España, hasta el punto de decidir el destino del municipio de Canfranc, en el corazón del valle del río Aragón y donde residen 550 habitantes. Sus paredes han observado el tránsito de peregrinos en una de las rutas del Camino de Santiago hacia la capital de la comarca de Jacetania, Jaca, y también del paso (y escondite) de espías, judíos huidos y el oro nazi robado durante la Segunda Guerra Mundial.

La línea Zaragoza-Canfranc-Pau

La línea ferroviaria que la atraviesa conectaba 310 kilómetros entre Zaragoza-Canfranc-Pau, aunque un accidente en marzo de 1970 (el descarrilamiento de un tren que dañó un puente clave en la parte francesa) la condenó al abandono durante décadas. Hasta enero de 2023, cuando el grupo Barceló rescató el edificio modernista y reformó su arquitectura netamente industrial para albergar el Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel, con 104 habitaciones de lujo preciosista al más puro estilo de los años 20, spa y todas las comodidades propias del siglo XXI (piscina climatizada, espacio fitness y biblioteca de ensueño).

Su propuesta más singular es gastronómica y se llama Canfranc Express: a bordo de dos vagones reconvertidos en restaurante de pocas mesas, una cocina, dirigida por Ana Acín, y el chef Eduardo Salanova, se ha aupado en pocos meses como una de las once Estrellas Michelin de Aragón.

Planes hasta 2032 y electrificación en 2040

La inminente reapertura del 'canfranero' (la línea que une Huesc y Canfranc está planificada para este próximo mes de febrero) y del tren Zaragoza-Canfranc-Pau, urgido en la parte española en sus primeros compases para este mismo 2025 –con ancho estándar que lo conecte con importantes plataformas logísticas–, podrían devolverle al lugar el tránsito de mercancías y pasajeros perentorio para atraer público extranjero y fijar población local.

Imagen - La línea Zaragoza-Canfranc-Pau recibirá luz verde este 2025 tras 55 años cerrada

La línea Zaragoza-Canfranc-Pau recibirá luz verde este 2025 tras 55 años cerrada

Imagen del Canfranc Express

Los planes, no obstante, en la parte francesa, especialmente para la reconstrucción de 85 kilómetros entre Canfranc y Oloron, se demoran -según los estudios- hasta 2032. Antes de ese año no habría tráfico ferroviario.

De acuerdo con el gestor ferroviario francés, el SCNF (el equivalente a Adif en el país vecino), requiere una inversión de 450 millones de euros para poner en marcha la infraestructura necesaria al otro lado de los Pirineos. El pasado mes de diciembre el presidente de Aragón, Jorge Azcón, aseguró en un acto en Oloron-Sainte-Marie que, con fondos europeos y plazos determinados también por Bruselas, el proyecto recibirá luz verde este año, con la culminación de una encuesta pública que permitirá evaluar la utilidad del proyecto y se prolongará hasta 2040 con la electrificación posible de la línea. Azcón urgió los trámites preceptivos, ya que, reseñó, recuperar la conexión transfronteriza servirá para reactivar económicamente ambas regiones implicadas, Aragón y la Nueva Aquitania francesa.