Luz verde del Vaticano a las apariciones de la Virgen a dos niñas de Extremadura en 1945
Así se lo ha hecho llegar a través de una carta, que cuenta con el beneplácito del Papa Francisco, el prefecto de la Doctrina de la Fe, Víctor Manuel Fernández, al arzobispo de Mérida-Badajoz, monseñor José Rodríguez Carballo: «Este Dicasterio presta gustosamente su conformidad para que usted proceda a la declaración del 'nihil obstat' propuesto».
Este término es el de mayor nivel dentro de los seis tipos de sentencias que propuso este departamento vaticano cuando se presentaron las nuevas normas el 17 de mayo para tratar los fenómenos sobrenaturales. Por eso, el Dicasterio, desde entonces, no declara la validez del hecho -solo el Papa tiene esa potestad-, sino que se limita a señalar si lo ocurrido tiene tiene errores doctrinales o no.
En el caso de Extremadura, significa que «no se han detectado, al menos hasta ese momento, aspectos especialmente problemáticos o arriesgados». De hecho, el cardenal Fernández resalta en la misiva que existen puntos «positivos» que indican la «acción del Espíritu Santo» en aquel lugar, hoy en día convertido en el Santuario de Nuestra Señora de los Dolores de Chandavila, y al que asisten gran cantidad de peregrinos españoles y portugueses a conversiones o curaciones.
También el prefecto hace hincapié a la vida de discreción y «sin estridencias» que llevaron las niñas después de las visiones: «Ambas se dedicaron a obras de caridad, atendiendo a personas enfermas, ancianas o huérfanos, transmitiendo a las personas sumidas en el dolor aquel dulce consuelo del amor de la Virgen que ellas habían experimentado».
De rodillas por un camino de erizos
Toda la información sobre este fenómeno extraordinario llegó a Roma y, tras ser estudiado, es en esa carta de la Doctrina de la Fe, titulada 'Una luz en España', donde se dan algunas pinceladas del pasaje vivido por Marcelina en la tarde del 27 de mayo de 1945, cuando en la zona de Chandavila vio sobre un castaño «una forma oscura en el cielo que se fue perfilando después como la Virgen de los Dolores».
La niña contaba que llevaba un manto negro de estrellas y que no solo vio a aquella mujer, sino que sintió su abrazo y el beso que le dio en la frente. También que, al paso de los días, la Virgen le pidió pasase «de rodillas por una tramo de erizos de castaño secos, espinos y piedras cortantes». Sin embargo, no lo hizo «para provocarle un sufrimiento», sino para pedirle confianza en ese desafío, en el cual no le sucedió nada a la joven extremeña. De hecho, sus rodillas quedaron intactas.
Por tanto, tal y como señala el arzobispado de Mérida-Badajoz, tras la investigación realizada por Roma, lo emitido por el Vaticano «es la primera declaración oficial de la Iglesia, en sus más altas instancias, sobre el santuario de Ntra. Señora de los Dolores de Chandavila después de 75 años desde que surgiese la devoción». Además, anuncian que este sábado monseñor Carballo hará público un decreto en base a esta resolución de la Santa Sede.