El BCE mantiene los tipos de interés en el 4,5% pese a rebajar las previsiones de inflación

El Banco Central Europeo (BCE) sigue sin mover ficha y ha decidido mantener intactos los tipos de interés en el 4,5% a pesar de rebajar de forma contundente las previsiones de inflación. Según ha difundido en un comunicado, la institución que preside Christine Lagarde pronostica que ya en 2024 el IPC medio en la zona euro será del 2,3%, cuatro décimas menos que en diciembre, y que se situará en el 2% el próximo año y en el 1,9% en 2026. La autoridad monetaria justifica la decisión en “las presiones inflacionistas internas”, que a su juicio “siguen siendo intensas, debido en parte al fuerte crecimiento de los salarios”.

De nuevo, el BCE no ha dudado al enfrentarse al dilema de inflación o crecimiento. De hecho, las proyecciones de Fráncfort confirman el frenazo económico en los países de la moneda única, cuyo PIB este año crecerá el 0,6%, dos décimas menos que el augurado en diciembre. La francesa comparece desde las 14.45 para dar cuentas de la reunión del Consejo de Gobierno del BCE, que los mercados prevén que empiece a discutir en este semestre las primeras bajadas de tipos.

Los consejeros del BCE han abandonado ya el apacible consenso que se produjo en el seno de la institución durante la crisis inflacionista. Una vez superadas las dudas iniciales, apenas hubo discrepancias sobre la abrupta subida del precio del dinero. Las diferencias entre el sector más ortodoxo —los llamados halcones— y el más laxo —las palomas— han empezado a aflorar con la bajada de la inflación, que llegó al 10,6% en octubre de 2022 pero que en febrero ya se situó en el 2,6%. El sector más heterodoxo —entre los que están los gobernadores de Francia, España, Italia o Portugal— se ha cargado de razones con los últimos datos de actividad industrial de Alemania o Francia, que son mejores de lo esperado pero siguen situándose en terreno negativo.

El BCE cuenta desde hoy con nuevas previsiones de inflación y crecimiento económico con las que avanzar. Sin embargo, los analistas creían que esta reunión todavía era muy temprana para empezar con las rebajas de tipos, máxime cuando la Reserva Federal sigue en modo de espera. A pesar de que la inflación sigue cediendo y las condiciones crediticias siguen endureciéndose, Lagarde quiere observar la evolución de los salarios en la zona euro, que en el cuarto trimestre de 2023 dieron ya síntomas de relajación. Por ello, los mercados dan por hecho que las bajadas empezarán en junio y lo harán de forma progresiva en tandas de 0,25 puntos porcentuales.

[Noticia de última hora. Habrá ampliación]

Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO