Fabien, el estudiante que encontró a Alex Batty en Francia: «El joven fingió llamarse Zach. Luego me contó su historia»>

«Estoy vivo, que no es poco, estoy en Toulouse y te quiero», en resumen, le dijo. La abuela, en conversación con el mismo medio francés, comentó que «está muy feliz» y que solo tiene ganas de reencontrarse con su nieto, Alex Batty, a quien perdió la pista el 8 de octubre de 2017 cerca de Marbella. Debían regresar ese día a Oldham, en Inglaterra, con su abuelo materno (de quien Susan está separada) y con su madre Melanie, aunque la tutora legal del niño era la abuela materna. Susan ha dicho estar muy «frágil» para volar a Toulouse, pero la Policía británica ha declarado hoy que «en pocos días» ese sueño será realidad.

Fabien ha concedido una entrevista a la prensa local y ha asegurado que Alex llevaba ya cuatro días caminando por las montañas pirenaicas cuando se lo encontró, caminando por una carretera cercana a Villefranche-de-Lauragais, entre el departamento francés de Ariège y Aude.

Fabien es un estudiante de Quiropráctica que se cruzó con un joven este miércoles por la tarde y no tenía ni idea de que acababa de salvar la vida de un niño que se sospecha fue «raptado» por sus familiares seis años antes en Málaga, para internarlo en una secta -se habla de 'La luz del mundo', originaria de México, aunque este extremo no ha sido confirmado- a la que pertenecería también la madre y el abuelo.

Habla desde su apartamento en Toulouse y Fabien no puede creer lo que ha sucedido, cuenta en exclusiva a «La Depeche du Midi'. Quería ayudar a un joven que caminaba solo a un lado de una carretera sin iluminación y terminó por resolver una de las desapariciones más misteriosas que se han registrado en los últimos años.

«El joven vestía jeans negros, un suéter blanco y una mochila. También llevaba un patinete bajo el brazo y una linterna»

Fabian trabaja en entregar medicamentos a las farmacias. El miércoles, como suele ser el caso, condujo de noche. Alrededor de las 4.00 horas, en el camino entre dos farmacias, cerca de Chalabré, en el Aude: «Me encontré con un joven. Caminaba mientras arreciaba la lluvia y la segunda vez que me crucé con él, decidí ofrecerme a dejarlo en algún lugar», confiesa.

Es «bastante alto, rubio. Vestía jeans negros, un suéter blanco y una mochila. También llevaba un patinete bajo el brazo y una linterna para iluminarse. Su actitud me dio confianza. Terminó subiéndose a mi camioneta«, asevera.

El periódico le pregunta cómo estuvo después y Fabien dice que Alex se mostró tímido, que no dominaba el francés y hablaron en inglés. Al preguntarle su nombre «fingió ser Zach».

«¡Hablamos durante más de tres horas! Luego me dio su verdadera identidad, Alex Batty, antes de explicarme su historia. Dijo que su madre lo secuestró cuando tenía 12 años. Desde entonces, había vivido en España en una casa de lujo con una docena de personas. Habría llegado a Francia alrededor de 2021. A mediados del fin de semana, había decidido dejar a su madre para reunirse con su familia en Inglaterra. ¡Había estado caminando por las montañas durante más de cuatro días!!.

«Me dijo que su madre estaba un poco loca»

«Vivió con su madre en una comunidad espiritual, alejada de la vida clásica. Alex me dijo que su madre estaba un poco loca, pero que nunca lo había encarcelado. Podía irse si quería. Quería encontrar a su abuela. Echaba de menos a sus seres queridos«. »Me pregunté si era cierto«, acaba por confesar Fabien. La comuna itinerante se sitúa en las montañas entre el Ariège y el Aude.

Llevaba dinero encima y tenía sed son otras de las explicaciones que da el estudiante. A su abuela la contactó a través de la cuenta de Facebook de este joven, que terminó por acercarlo a la comisaría de la Gendarmería más próxima y dar una salida a esta historia.