Pepe Álvarez se postula para la reelección como líder de UGT: tercer mandato y la reducción de jornada en el punto de mira

Nacido en marzo de 1956 en la localidad asturiana de Belmonte de Miranda, Álvarez fue designado por primera vez secretario general de UGT en marzo de 2016, sustituyendo en el cargo a Cándido Méndez, que llevaba ya 22 años como dirigente del sindicato. Posteriormente, en mayo de 2021, fue reelegido para un segundo mandato durante el 43 Congreso Confederal de UGT. Con la presentación de su candidatura para el 44 Congreso, Álvarez opta a un tercer y último mandato de cuatro años, pues los Estatutos del sindicato limitan a tres mandatos la Secretaría General del sindicato. Dicha limitación se introdujo en el 41 Congreso Confederal de UGT, celebrado en abril de 2013, pues hasta entonces no existía ninguna limitación en los Estatutos.

Los grandes 'caballos de batalla'

El secretario general de UGT, más allá, ha tenido que lidiar con las turbulencias de los últimos cuatro años azuzadas por el impacto de la pandemia, que han obligado a negociar con el Gobierno y las organizaciones empresariales un buen puñado de medias coyunturales -la ampliación y mejora de los ERTE para dar protección a los trabajadores durante los peores momentos de la crisis sanitaria-, además de las coyunturales que en última instancia han sido mandatadas por la Comisión Europea como condición 'sine qua non' para la recepción de los fondos europeos. Aquí, la reforma laboral consensuada con las organizaciones sindicales CEOE y Cepyme se alza como uno de los grandes logros, si bien los frutos de la misma parecen no colmar las pretensiones del sindicato ni deja satisfecho a Álvarez a la vista de los últimos comentarios al respecto, tras conocerse los últimos datos de empleo del mes de agosto en el que se perdieron casi 200.000 puestos de trabajo.

«No nos podemos conformar sólo con los años turísticos, sólo con el empleo estacional, sino que hay que ir a empleo que genere estabilidad y buenas condiciones de trabajo» señalaba Álvarez hace escasos días apuntando que aunque la reforma laboral ha traído «mejoras muy sustanciales», siguen existiendo problemas «muy serios» en el mercado laboral, como la duración de los contratos.