La Audiencia de Barcelona rechaza que el juicio a Dani Alves sea a puerta cerrada: será público salvo el testimonio de la víctima
El juicio a Dani Alves, acusado de violar a una chica en los baños de una conocida discoteca del centro de la capital catalana, no será a puerta cerrada. Las sesiones serán en audiencia pública salvo la declaración de la víctima, que sí se hará a puerta cerrada para preservar su anonimato.
Una medida que ha acordado este jueves la Audiencia de Barcelona en vísperas de que arranque uno de los juicios más mediáticos del año en la capital catalana.
En un auto, la sección 21 de la Audiencia ha rechazado la petición de la Fiscalía, la acusación particular ejercida por la víctima y la defensa de Alves de que el juicio se celebre a puerta cerrada, aunque garantiza medidas para proteger al máximo la identidad de la denunciante y su confrontación visual con el acusado.
De esa forma, los medios podrán seguir el juicio por señal interna, sin difundir imágenes ni sonido de la sala desde los espacios habilitados para la prensa.
La declaración de la víctima sí será a puerta cerrada y declarará protegida de la visión de Alves mediante un biombo, con la imagen pixelada y la voz distorsionada.
El tribunal también prohíbe "la divulgación o publicación de información relativa a la identidad de la denunciante", así como los datos que puedan facilitar su identificación y la de sus familiares de forma "directa o indirecta". Además, ordena que no se capten imágenes de ella o de sus "familiares cercanos" que puedan declarar en el juicio o estén en el Palacio de Justicia acompañándola a partir del próximo lunes.