La primera ley de PP y Vox: enseñanza en castellano en determinadas zonas y "equilibrio" en el resto con el valenciano

La Comunidad Valenciana es el primer territorio que pone a prueba la entente de PP y Vox en una materia sensible como es la educación, y más en una región bilingüe. Ambos socios de gobierno han presentado este jueves su proposición de ley por la que se regula la "libertad educativa", una cuestión de la que ambos partidos hicieron bandera en la oposición y que ahora supone la primera iniciativa legislativa conjunta. La norma es una enmienda al modelo de plurilingüismo del anterior gobierno de izquierdas.

Al igual que hicieron PSOE, Compromís y Unidas Podemos, también PP y Vox presentan una norma que no emana del Consell, donde son los populares los que dirigen Educación. La proposición de ley supone, en la práctica, el blindaje de la enseñanza en castellano en las zonas castellanohablantes, donde se elimina definitivamente el mínimo obligatorio del 25% del tiempo lectivo en valenciano que instauró el anterior gobierno y que levantó en armas a buena parte de la comunidad educativa.

Esto significa que la obligación de un mínimo del 25% de valenciano solo será aplicable en las comarcas valencianohablantes que recoge la Ley de Uso y Enseñanza del Valenciano de 1983. En estas comarcas, sin embargo, no se permitirá la inmersión total en valenciano, pues sí que regirá la obligación de un mínimo del 25% de castellano que ya regulaba la Ley de plurilingüismo de 2018.

Ahora bien, si la normativa de la izquierda planteaba como objetivo llegar al 60% de valenciano, PP y Vox introducen por primera vez la presencia "equilibrada" de las dos lenguas cooficiales a partir del tercer curso de Primaria (de nuevo, la excepción son las zonas castellanohablantes). Con una novedad importante, porque la "diferencia máxima" entre valenciano y castellano será del 20% del tiempo entre ellas.

Esto supone, en la práctica, que desde tercero de Primaria "aproximadamente el 50% del tiempo lectivo se impartirá en la lengua base, y el resto del tiempo se repartirá entre la otra lengua cooficial y el inglés", según las fuentes consultadas. PP y Vox se acogen aquí a las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana que cuestionaron el "gran desequilibrio" que permitía el anterior Consell entre las dos lenguas oficiales.

En cuanto al inglés, el mínimo obligatorio será del 10% en Infantil, mientras que en Primaria y ESO podrá oscilar entre el 15 y el 25%. En todo caso, se admitirán programas experimentales que superen ese 25% del tiempo lectivo en inglés.

Los programas experimentales a los que pone fin la proposición de ley de PP y Vox son los que permitían hasta ahora la inmersión en valenciano en Infantil (con un 10% de inglés), y que tenían implantados 221 colegios. Se extinguirán en el curso 2024-2025.

Por tanto, en las zonas castellanohablantes, "se garantiza que todo el alumnado cursará la asignatura de Valenciano", pero ya no será obligatorio impartir otras materias no lingüísticas en la lengua cooficial. Además, el alumnado podrá pedirse la exención de la asignatura de Valenciano.

En cuanto a las zonas valencianohablantes, "la lengua base siempre tendrá mayor peso que la otra lengua cooficial". En Infantil y primeros cursos de Primaria, la otra lengua cooficial se cursará durante al menos un 25% del tiempo lectivo, ya sea valenciano o castellano. Será en cursos posteriores cuando "habrá un mayor equilibrio entre las dos lenguas cooficiales".

A pesar de ello, PP y Vox mantienen que con este cambio normativo las familias tendrán capacidad de elegir esta lengua base o lengua vehicular principal, pues se organizará una consulta entre todas ellas. En función de los resultados, "se determinará cuántos grupos se ofertan en cada lengua base, haciendo prevalecer, en última instancia, el criterio de la mayoría".

Cuando las familias accedan a un nuevo centro en Educación Infantil, la elección se realizará en el marco del proceso de admisión. Para las familias con hijos ya matriculados en un centro, la participación se efectuará a través de una consulta telemática.

Otra de las novedades tiene que ver con la lengua en la que se realizan los exámenes. Entidades como Hablamos Español habían pedido libertad de elección, y en las asignaturas no lingüísticas, el alumnado podrá decidir si realiza en valenciano o castellano los exámenes y las pruebas de evaluación. En esta línea, también será obligatorio el "formato bilingüe" para todas las comunicaciones del centro con las familias.

La ley se aplicará en su totalidad en cuestión de dos años, pues ya deberá estar en vigor todo su articulado en el curso 2025-2026. Será entonces cuando puedan pedirse también la certificaciones automáticas del nivel de valenciano.

Se reconocerán los siguientes niveles de valenciano de acuerdo con el Marco Común Europeo de Referencia (MCER) para las Lenguas: A2, al superar el área de Valenciano los seis cursos de Educación Primaria; B1, al superar la materia de Valenciano los cuatro cursos de ESO, o en tres cursos de ESO y en primero de Bachillerato; B2, al superar la materia de Valenciano los dos cursos de Bachillerato; y C1, al superar la materia de Valenciano los dos cursos de Bachillerato con una media de la asignatura igual o mayor a 7, o al obtener una calificación igual o superior a 7 en la prueba de valenciano del acceso a la universidad.