El documento ratifica el compromiso de Washington para seguir apoyando al país en guerra durante la próxima década. «Queremos demostrar que Estados Unidos apoya al pueblo de Ucrania, que estamos con ellos y que continuaremos ayudando a abordar sus necesidades de seguridad no sólo mañana sino en el futuro», dijo el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan. Como sucede con el resto de acuerdos rubricados, ninguno de los firmantes tendrá la obligación de intervenir de forma directa si Ucrania es atacada de nuevo por Rusia. Además, si el documento firmado por Biden no es ratificado por el Congreso de Estados Unidos, los futuros inquilinos de la Casa Blanca podrían retirarse del mismo.
El mandatario ucraniano manifestó que ya se habían firmado 17 documentos de este tipo con otros países como Alemania, Francia, Suecia, Reino Unido o España. «Ya hemos firmado siete acuerdos de seguridad con todos los países del G7 (Grupo de los Siete). En total, ya se han firmado 17 acuerdos y nos estamos preparando para firmar otros 10». Zelenski destacó la importancia del acuerdo alcanzado con Tokio, el primero de este tipo con un país que no es miembro de la OTAN. «Hemos llevado nuestras relaciones con Japón a un nivel que no tienen muchos países europeos. Trabajamos juntos en las esferas de seguridad, política y económica. Para este año se han garantizado 4.500 millones de dólares de ayuda por parte de Japón», declaró el jefe de Estado de Ucrania.
La iniciativa de dar garantías de seguridad en formato bilateral a Ucrania hasta su eventual membresía en la OTAN surgió de la Cumbre de la Alianza celebrada en Lituania en julio del año pasado. Entonces los líderes del G7 -Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y Estados Unidos- hicieron pública una Declaración Conjunta en apoyo a Ucrania. Según el texto los aliados de Kiev se comprometieron a dar asistencia militar y entrenamiento a las fuerzas armadas de Ucrania, apoyar la industria de defensa del país en guerra e intercambiar inteligencia.