Sánchez se desvincula de la trama de las mascarillas y niega que tuviera información cuando destituyó a Ábalos como ministro

Pedro Sánchez ha marcado distancias este miércoles con la detención de Koldo García Izaguirre, mano derecha del ex ministro José Luis Ábalos, acusado de formar parte de una trama que presuntamente cobró comisiones ilegales por adjudicar contrataos de productos sanitarios durante la crisis del Covid. El presidente del Gobierno ha desvinculado también la decisión de destituir a quien fuera su hombre fuerte porque tuviera información sobre este hecho.

En una rueda de prensa durante una visita exprés a Marruecos, el mandatario español ha defendido que, desde que llegó a La Moncloa en 2018, su Ejecutivo ha colaborado con la Justicia "siempre". "Desde luego, más allá del recorrido judicial, cualquier intento de enriquecimiento a través del cobro de comisiones en una tragedia como fue la pandemia, como desgraciadamente hemos visto en otras autonomías, cuenta con mi reprobación y reproche", ha subrayado.

En este sentido, Sánchez ha indicado que le llaman la "atención" las "maledicencias" de la oposición cuando Alberto Núñez Feijóo llegó a la cúpula del PP por un caso "que no ha sido investigado ni recriminado", en alusión al presunto cobro de comisiones del hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por la compra de mascarillas. A lo que no se ha referido es a que la Fiscalía Anticorrupción archivó este caso en 2022 al no detectar ningún "trato de favor".

García Izaguirre ha sido arrestado en el marco de una investigación de la Fiscalía Anticorrupción en ocho provincias y con detenciones en Madrid, Murcia y Alicante. A los arrestados se les imputan los delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho por la adjudicación de contratos con varias administraciones.