El pontéfice debía iniciar una visita de tres días el viernes por el país asiático, donde se va a celebrar la cumbre del clima COP28.
El Pontífice, con una vía en la mano derecha y dificultades para respirar, ha dejado que un sacerdote lea la mayor parte de su meditación y solo ha impartido la bendición
Este lunes, la Oficina de Prensa del Vaticano comunicó que el estado de salud del Papa era «bueno y estacionario» y se descartaba una pulmonía. Padecía una inflamación pulmonar que le ha obligado a cancelar algunos compromisos en los últimos días.
Los problemas respiratorios de Francisco comenzaron el sábado, por lo que fue trasladado al Policlínico Gemelli de Roma para realizar un TAC «y excluir el riesgo de complicaciones pulmonares». «El resultado ha sido negativo y el Papa ha regresado a Casa Santa Marta», explicó entonces Bruni.
Ese mismo día, tuvo que cancelar algunos de sus compromisos, pero la inflamación pulmonar no le impidió rezar el domingo, aunque lo hizo desde su capilla personal en su residencia Casa Santa Marta y no desde la ventana que asoma a la plaza de San Pedro.