Carla también lucha contra los prejuicios: «Ojalá nunca te veas en la situación de que te amputen las cuatro extremidades»>

La estudiante de Derecho ha colgado una 'story' en su perfil de Instagram con la conversación que mantuvo con un usuario de la citada red social, quien cargaba con su actitud delante de los focos. «Siento mucho lo que te ha pasado, pero se te ve demasiado feliz contando tu historia», se atrevió a decirle a la mujer que ha perdido manos y pies hace apenas unos meses, tal y como informó ABC. Pero no se quedó ahí, pues le achacó que «no se nota que económicamente seáis una familia que necesite ayuda» y que no entiende «que recién salida del hospital se ponga a pedir dinero».

Lejos de amilanarse o evitar el confrontamiento, Carla decidió contestarle y compartirlo para evidenciar lo «fácil» que es «prejuzgar desde una pantalla sin sentir el dolor» que siente la otra persona. En el mensaje que le remitió, la joven valenciana no duda en pedirle «empatía» por todo lo que está viviendo desde que el pasado 23 de marzo entrara en el hospital.

«Ojalá nunca te veas en la situación de que te amputen las cuatro extremidades y te arranquen tu vida de la noche al día y a ver si aprendemos a tener un poco más de empatía», fueron las palabras de la paciente natural de Xàtiva. Desde sus redes sociales, ha tomado la iniciativa de concienciar y visibilizar su historia bajo las siglas del eslogan #Tusmanossonmismanos, en la cual ya ha recibido el apoyo de algunas personalidades como la de la periodista Irene Villa, quien perdió las dos piernas y tres dedos de la mano izquierda durante un atentado de ETA en el año 1991.

El calvario de Carla comenzó el pasado 23 de marzo cuando acudió al hospital para someterse a una operación quirúrgica sencilla para quitarse un quiste en la ingle. Pese a marcharse con total normalidad del centro sanitario tras la intervención, al día siguiente regresó al médico y le diagnosticaron la presencia de una bacteria en su cuerpo que la obligó a ingresar de urgencia en la UCI, donde la indujeron en coma tras padecer hasta cuatro paradas cardiorrespiratorias.

Estuvo cerca de tres meses ingresada y unos doce días en coma, tiempo en el que los facultativos llegaron a decirles a sus padres que se despidieran de ella. Pese a todo, incluida la pérdida de sus cuatro articulaciones, Carla no ha perdido la esperanza y quiere luchar contra todo y «volver a ser feliz». «Ha sido una montaña rusa, pero también ha marcado un antes y un después en mi vida», recalca.

Así, ha decidido compartir el día a día de su historia y pide ayuda financiera para cubrir el elevado coste de las prótesis que necesita. De esta manera, trabajará para concienciar sobre este tipo de infecciones provocadas por bacterias necrotizantes y promete seguir contando cómo es capaz de creer, como recalca en su perfil, que «es el principio de todo».