El desagradable gesto de Meghan Markle para evitar que una mujer posase junto al Príncipe Harry>

Para la ocasión, la exactriz estadounidense escogió un elegante vestido blanco con falda plisada abierta a la cintura y el cuerpo con cuello halter. Un espectacular diseño de la firma Heidi Merrick, valorado en 400 euros. Como complementos, la duquesa de Sussex se decantó por unas gafas de sol XXL, un bolso del mismo tono que el vestido de Valentino y unos zapatos de salón en tono nude de tacón alto.

Al evento también acudió una de sus mejores amigas, Serena Williams (42 años). La tenista y Meghan Markle se conocieron en el año 2014 y, a pesar de la distancia, siguen siendo un gran apoyo la una para la otra. «La llamo, le envío un mensaje de texto en cualquier momento, llorando, molesta: siempre está ahí. No importa por lo que esté pasando, siempre tiene tiempo», describió en una ocasión la deportista sobre su relación de amistad con la exactriz. «Ella viajó con un recién nacido para verme jugar en Nueva York y regresó esa noche, probablemente no debería haber hecho eso», detalló sobre el viaje relámpago que realizó Meghan para verla jugar la final del US Open. Un viaje que fue tremendamente polémico por el hecho de viajar con el pequeño Archie cuando apenas tenía unos días de vida. «Es la persona más fuerte que conozco, la más linda, la más dulce», añadió en la entrevista concedida a 'Acces Hollywood'.

Justo antes de comenzar el partido de polo, ambas se fundieron en un cariñoso abrazo y después mantuvieron una charla muy animada. El equipo de Harry resultó ser el ganador de la competición y Meghan Markle fue la encargada de entregar el trofeo a su esposo. En ese momento, la pareja se fundió en un romántico beso que se hizo viral en redes sociales en pocos minutos.

Sin embargo la anécdota del día se dio durante la entrega de premios. Cuando Meghan Markle subió al escenario, junto a ella subió también otra mujer para hacerse una foto con el equipo ganador. En un principio intentó situarse entre el matrimonio, pero la duquesa no se separó de su marido indicando a la mujer que se pusiera al otro lado.

Un incómodo gesto que ha sido muy criticado en redes sociales.