El Supremo permite a Trump expulsar a otros 500.000 inmigrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela

Con esta decisión, se amplía a casi un millón el número de personas expuestas a la expulsión desde el regreso de Donald Trump al poder.

La resolución de este viernes, 30 de mayo, anula el bloqueo cautelar previo impuesto por un tribunal federal de Boston, que había frenado la medida impulsada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en aplicación de una orden ejecutiva (decreto) firmada por el presidente en marzo.

El programa se llama CHNV (iniciales de los países afectados) permitía residir y trabajar legalmente en EE.UU. durante dos años, siempre que los solicitantes contaran con un patrocinador que se hiciera cargo de sus gastos iniciales. Este es un programa adicional al del llamado TPS, que permitía la entrada temporal de esos y otros países.

Las magistradas Sonia Sotomayor y Ketanji Brown Jackson, consideradas ambas progresistas, votaron en contra. Jackson advirtió en su voto particular que esta decisión provoca que «las vidas de medio millón de personas se desmoronen ante nosotros antes de que los tribunales resuelvan sus recursos».

El programa había sido creado por la Administración de Joe Biden en 2022 para canalizar la migración de forma más ordenada, en un frenesí de ingresos irregulares por la frontera con México.

Desde su llegada al poder, Trump ordenó su desmantelamiento, como parte de una ofensiva más amplia contra la inmigración. El Supremo también ha autorizado la revocación del estatus protegido para otros 350.000 venezolanos en el caso del TPS. Deberán salir del país el mes entrante, en principio.

La portavoz de la presidencia, Karoline Leavitt, dijo el jueves que «miles de inmigrantes ilegales ya han optado por autodeportarse». El Gobierno federal les ofrece mil dólares por irse.

Grupos de inmigrantes y una ONG recurrieron la eliminación del programa, argumentando que la ley exige un análisis caso por caso para retirar permisos que ya fueron concedidos. Una jueza federal les dio la razón, pero la Casa Blanca ha conseguido revertir la medida en el alto tribunal, que sigue admitiendo recursos de urgencia del Gobierno Trump en múltiples causas judiciales aun abiertas.