Jorge Javier Vázquez se revuelve contra sus excompañeros de 'Sálvame' por sus ataques a 'Supervivientes'
El presentador respondió a las acusaciones de manipulación del 'reality' de la cadena de Mediaset que se han hecho desde 'Ni que fuéramos'
'Aruser@s' acababa prácticamente de empezar, cuando Marc Llobet, colaborador del programa, daba los titulares más destacados del día. «Preocupación máxima: las monjas tienen las cuentas bancarias bloqueadas. Acusan directamente al arzobispo de dejarlas sin dinero. Este es el comunicado que acaban de lanzar las religiosas...», informaba el periodista que también se hacía eco de cómo las monjas habían denunciado el lanzamiento de «petardos y botes de humo» por lo que las monjas de Belorado se estaban planteando contratar «seguridad privada».
Con la exposición de los hechos de su colaborador, Alfonso Arús se lanzó a valorar la situación de las monjas de Belorado. «Vamos a ver, el tema de las cuentas bloqueadas podemos solventarlo con Bizums», bromeaba el presentador de 'Aruser@s'. «Hay que enviar, hay que apoyar, creo que hay que colaborar en la medida de lo posible», apuntaba Arús que inmediatamente exponía la gran duda que le rondaba la cabeza. «Pero, sigo sin entender los botes de humo quién los lanza», exponía el presentador. «Claro, eso es. Es que no entendemos quién lanza qué», apuntaba Angie Cárdenas, colaboradora de 'Aruser@s' al hilo del cuestionamiento que había puesto sobre la mesa su compañero.
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«A ver, la monja no creo que lance el bote de humo y los periodistas tampoco», afirmaba Alfonso Arús, a lo que algunos tertulianos del espacio de La Sexta ironizaban con el hecho de que hubiera «algún periodista generando controversia».
Un sinfín de chascarrillos que tuvieron su punto máximo, cuando el presentador de 'Aruser@s' hacía una original comparativa. «A ver los botes de humo ya suena a gran final o a un partido del Galatasaray», decía en tono de humor Alfonso Arús zanjaba el asunto. «Bueno, de momento, las cuentas bloqueadas, botes de humo y la posibilidad de contratar seguridad privada pero sin dinero va a resultar difícil», sentenciaba Arús.