La investigación comenzó a mediados del pasado año cuando los especialistas en la lucha antiterrorista de la Policía detectaron a una persona altamente radicalizada que difundía contenido violento de carácter yihadista.
El nivel de radicalización yihadista del detenido había incrementado durante la investigación y él mismo había llegado incluso a manifestar su voluntad por hacer la Yihad en un futuro. El consumo prolongado de contenido proyihadista en internet y su voluntad de desplazarse a zona de conflicto llevaron a la Policía a detenerlo.
El detenido, que mostraba gran interés por acciones violentas y armadas, ha ingresado en prisión tras su puesta a disposición del Juzgado Central de Instrucción número Cuatro de la Audiencia Nacional.