Feijóo promete independencia a los agentes sociales frente al recorte de la jornada laboral a 37,5 horas que impone Yolanda Díaz

"Flexibilidad" y "diálogo social". Son los dos pilares sobre los que pivota la propuesta del Partido Popular en materia de conciliación laboral. Frente a la reducción de la jornada por ley que está imponiendo el Gobierno en la negociación abierta con la patronal y los sindicatos, los populares se desmarcan con un planteamiento basado en la distribución de los horarios pactada entre empresarios y trabajadores. Un modelo que, así planteado y a diferencia de la semana laboral de cuatro días que lanzó hace unas semanas Alberto Núñez Feijóo, sí encaja en la hoja de ruta de la CEOE.

Nada impuesto y todo negociado. Es lo que ofreció ayer Feijóo al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que fue el primero en acudir a Génova a conocer el detalle de la Ley de Conciliación y Corresponsabilidad Familiar del PP y pudo constatar que en el texto no hay ni rastro de la controvertida jornada laboral de cuatro días. Y no sólo eso, sino que todo el apartado sobre flexibilidad laboral deja la implementación de las medidas al albur de la negociación entre las empresas y los representantes de los trabajadores y en función de las necesidades de los distintos sectores. Algo que Garamendi vio con buenos ojos: "Se está hablando dentro del marco del diálogo social. Estamos abiertos a hablar de horas, de días, de flexibilidad... siempre y cuando sea dentro de ese marco de negociación colectiva. Está en esa onda y, por tanto, igual que estamos exigiendo con las 37 horas y media, lo vemos ordenadamente".

Así, el máximo representante de los empresarios valoraba el encuentro con el líder de la oposición como "una reunión positiva" e insistía en que todo lo discutido, en el marco de la negociación colectiva, a la patronal le "encaja". Un tono más conciliador que el que mostraba hace tres semanas respecto a la propuesta de semana laboral de cuatro días que lanzó Feijóo en una entrevista en televisión. "Hay que separar la política del día a día", advertía entonces Garamendi, en pleno debate interno en el seno del PP por este asunto al oponerse el Ejecutivo madrileño de Isabel Díaz Ayuso a la reducción de la jornada laboral en España.

Superada, por tanto, la polémica inicial, la música que suena ahora en la agenda de conciliación laboral del PP sí gusta a la patronal. O, al menos, le agrada más que la que está escuchando en la mesa tripartita de diálogo social en la que el Ministerio de Trabajo quiere imponer por ley la reducción de la jornada hasta las 37,5 horas semanales. "Nosotros no vamos a plantear ninguna imposición", afirmaba ayer la vicepresidenta de Igualdad, Conciliación y Política Social del Partido Popular, Ana Alós, al término de la reunión entre Feijóo y Garamendi, para recalcar después que "en nuestra ley no aparece nada que tenga que ver con una jornada laboral de cuatro días".

Un 'banco de horas'

Es cierto que, pese a que Feijóo se ha referido en algún momento específicamente a la semana de cuatro días, en la Ley de Conciliación que ha registrado el PP en el Congreso no se hace mención alguna a ese modelo. Lo que recoge es la implementación de un "horario flexible" que incluya la posibilidad de "ajustar la jornada laboral diaria o semanal a través de opciones como la distribución flexible del tiempo de trabajo". Y, en todo caso, establece que "deberá acordarse entre la empresa y los representantes de los trabajadores, de acuerdo con las necesidades particulares de ambas partes, y sin que esto implique una disminución de las horas de trabajo ni del salario".

Además, contempla que "en el marco del diálogo social se regulará el derecho de los trabajadores a acogerse a un sistema de banco de horas como herramienta de flexibilidad laboral, de forma que les permita acumular horas de trabajo adicionales, horas extras, o tiempo no utilizado de permisos remunerados, con el fin de gestionar mejor su conciliación entre la vida laboral y personal".

Preguntados expresamente sobre la propuesta para reducir la semana laboral a cuatro días, fuentes del PP explican que lo que está proponiendo el partido a los agentes sociales "es el desarrollo de la jornada laboral flexible y la creación de bancos de horas que los trabajadores puedan usar en función de sus necesidades". "En la Ley de Conciliación del Partido Popular no aparece recogida la jornada de cuatro días, aunque es un debate legítimo que tendría que tratarse y acordarse dentro del diálogo social, sin imposiciones, porque los sectores son muy diferentes", añaden.

A última hora de la tarde era el turno del secretario general de CCOO, Unai Sordo, que comparecía desde la sede del PP para dar cuenta de su reunión con Feijóo. Hacía una valoración inicial positiva de la propuesta popular y se comprometía a estudiarla. "Es bueno que el primer partido de la oposición se meta en estos charcos", valoró el líder sindical, que se remitió a una reunión posterior para abordar específicamente la jornada laboral.

En este sentido, Sordo aclaró que la eventual reducción de la jornada "compete a la negociación colectiva" y recalcó que la "prioridad" del sindicato es "la reducción a 37,5 horas". Por ello, avanzó que, junto con UGT, pedirán una nueva reunión a Feijóo para trasladarle la propuesta sindical específica en esta materia.