Garbanzos salteados con champiñones y cebolla caramelizada
Pela y corta las cebollas en tiras finas.
Pon AOVE en una sartén grande a fuego bajo-medio.
Añade la cebolla con una pizca de sal, que ayudará a que suelte su agua.
Cocina lentamente durante 30-40 minutos, removiendo cada pocos minutos.
Verás cómo la cebolla se ablanda, cambia de color y va soltando sus azúcares naturales. La clave es la paciencia: no subas el fuego y no tengas prisa. Si ves que se pega, puedes añadir una cucharadita de agua caliente de vez en cuando y seguir removiendo.
Cuando esté muy blanda y de color marrón dorado, retírala y resérvala.
En la misma sartén, añade los ajos picados e incorpora los champiñones laminados.
Agrega los garbanzos cocidos, las especias (comino, pimentón, cúrcuma, chile) y sal al gusto.
Cocina 5 minutos más, removiendo para que todo coja bien el sabor.
Añade la cebolla caramelizada que reservaste y mezcla todo bien.
Justo antes de servir, exprime el zumo de medio limón.
Prueba y ajusta de sal y pimienta si hace falta y a disfrutar.