Xavi finge para protegerse de Laporta y Deco>

Es un viejo chiste anticlerical. «Santo padre, tengo que confesarle algo», le susurra un cardenal al papa. «Dime, hijo, dime». «Verá, santidad, mi problema es que yo en realidad no creo en Dios, ¿qué hago?» El papa se le queda mirando fijamente a los ojos ...